Verano en primavera en zonas de Europa: cambios bruscos de temperatura
La semana del 15 al 21 de abril de 2018 ha sido histórica desde el punto de vista meteorológico: en muchos lugares del centro de Europa se superaban los 25ºC de máxima y en algunos llegaban a los 30 ºC: verano en primavera
Y todo ello ocurría con una situación donde el chorro polar se ondulaba, dejando una borrasca aislada sobre el Golfo de Cádiz y una zona anticiclónica en centro de Europa con un ramal ascendente del chorro que inyectaba aire cálido y seco del sur. Los cielos despejados y el calentamiento solar hacían el resto.
Con ello, las temperaturas llegaron a tener anomalías positivas que en algunos lugares superaban lo 10-14 ºC, y desaparecían las heladas. De esta forma se iniciaban los deshielos de la nieve en zonas de montaña, los ríos “engordaban” y se producían algunas avalanchas en zonas altas y nevadas. Los esquiadores incluso podían ir en mangas y pantalón corto en las zonas de esquí.
Las precipitaciones con esta situación anticiclónica fueron escasas. Eso sí, la llegada de frentes y vaguadas atlánticas por el oeste garantizaban la presencia de tormentas y convección para mitigar estos calores anormales de abril en la semana subsiguiente.
Y todo esto venía de un mes de marzo más fresco de lo normal en muchas zonas en el viejo continente. Los cambios térmicos fueron muy bruscos y en pocas semanas.
Los mapas de la NOAA, con datos preliminares, nos muestran detalles de de este verano adelantado, entre el 15 y 21 de abril, que a final del mes de abril ya tenía los días contados.
Mapa de anomalías térmicas
Detalles más finos y diferencias se pueden tener en los informes semanales a nivel nacional de los SMHN de cada país.
Figuras: NOAA