La luz y las grandes moléculas

La luz de la primavera y verano  animan a la vida animal y vegetal. también favorece las formas "radicales"  y crea moléculas más grandes en la atmósfera

Con el verano acercándose, "mar y sol" pueden evocar imágenes de un viaje a la playa. Pero para los científicos, las interacciones de los dos tienen grandes implicaciones para el tiempo y clima, así como para la formación de diminutas gotas, o aerosoles, que conducen a las nubes.

En ACS Central Science, los investigadores demuestran que la luz del sol puede provocar que ciertas moléculas en la superficie del océano activen otras, lo que resulta en moléculas más grandes que podrían afectar la atmósfera.

Ciertas moléculas orgánicas se activan y reaccionan cuando absorben la luz solar. A menudo se genera un intermediario reactivo llamado "radical", que inicia una reacción en cadena que conduce a la formación de sustancias químicas más complejas.

Esta vía de "iniciador radical" es importante para entender qué moléculas en la superficie del mar terminan en la atmósfera, donde siembran nubes. Las moléculas que se encuentran en la atmósfera en los aerosoles determinarán si absorben o reflejan la luz solar, lo que afecta la temperatura del planeta.

Hasta ahora, los científicos habían centrado gran parte de su atención en el radical hidroxilo, que reacciona muy eficientemente en la atmósfera.

Rebecca Rapf, Veronica Vaida y sus colegas de la Universidad de Colorado proponen que una clase de compuestos llamados a-cetoácidos pueden ser fotoactivados por la luz solar y provocar reacciones con moléculas que no absorben la luz solar.

Los investigadores estudiaron dos a-cetoácidos diferentes y mostraron que la luz causaba que el ácido reaccionara con varios ácidos grasos y alcoholes. Estas clases de moléculas se encuentran comúnmente cerca de la superficie del océano, y son ubicuas en biología.

Los autores explican que esta química iniciada por la luz del sol podría cambiar la composición de la superficie del mar.

Las moléculas nuevas y más grandes formadas pueden agregarse a los aerosoles, cambiando sus propiedades y dando lugar a consecuencias interesantes y previamente imprevistas para la salud humana, la visibilidad y el clima.


Trabajo de investigación
Esta entrada se publicó en Noticias en 23 Abr 2018 por Francisco Martín León