La naranja de Florida golpeada por Irma y otras enfermedades
Golpeados por el huracán Irma de 2017 y una dolencia de los cítricos conocida como "enfermedad del dragón amarillo", los productores de naranjas de Florida se preparan para la peor cosecha en más de medio siglo.
Los pronosticadores están proyectando un rendimiento de 46 millones de cajas de naranjas para la temporada de naranjas de Florida en 2017-2018, una caída del 33 por ciento respecto del año pasado y la producción más baja desde al menos 1944-1945, según el Departamento de Agricultura de los EE. UU.
Algunas áreas han perdido tanto como el 90 por ciento de su fruta debido a los vientos de Irma, o al daño de las raíces debido a las inundaciones.
"Puede tomar meses para que los productores midan la verdadera escala del impacto del huracán Irma y años para recuperarse por completo", dijo Shelley Rossetter, portavoz del Departamento de Cítricos de Florida.
Las naranjas de Florida no son la única víctima de 2017, un año inusualmente intenso en los desastres naturales en América del Norte.
El incendio masivo "Thomas", considerado el segundo (o el primero, según datos más recientes) incendio más grande en California, ha dañado las cosechas de limón y aguacate en la región al norte de Los Ángeles.
Cientos de hectáreas de tierra productora se han quemado, dijo Ken Melban, vicepresidente de asuntos industriales de la Comisión del Aguacate de California.
"Es un incendio muy inusual, algunas áreas han sido quemadas varias veces", dijo Melban. "Tiene un tremendo impacto en los productores afectados por el incendio".
Pero Melban dijo que era difícil determinar el impacto total en los precios del aguacate debido a las mayores importaciones y el suministro de los productores de California no afectados por el incendio.
Tiempos amargos y duros
Pero en Florida, donde la industria naranja emplea a 45,000 personas y un impacto económico en el estado de miles de millones de dólares, el panorama es sombrío, especialmente desde que la industria ya se enfrentó a innumerables desafíos incluso antes de que Irma la golpeara en septiembre.
La enfermedad del enverdecimiento de los cítricos, también conocida como la enfermedad del dragón amarillo, es una enfermedad bacteriana propagada por los insectos que ha comenzado a dañar los cultivos, matando algunos árboles de naranja y haciendo que otras frutas sean pequeñas y agrias.
La producción de naranja en Florida, que alcanzó un máximo de 244 millones de cajas en 1998, cayó el año pasado a 67 millones.
No hay cura, por lo que los productores se están enfocando en formas de limitar la propagación de la enfermedad y en tecnologías y prácticas de cultivo que podrían desarrollar resistencia a la enfermedad.
"Las cosas estaban empezando a cambiar", dijo Rossetter. "Antes del huracán Irma, los productores de cítricos de la Florida esperaban 75 millones de cajas, el primer tamaño de cultivo en años".
Pero advirtió que tras el huracán, "sin el apoyo del gobierno estatal y federal, algunos productores podrían irse a la quiebra".
La industria estatal de la naranja también se ha visto presionada debido a la disminución de la demanda de jugo de naranja, ya que los estadounidenses prefieren menos bebidas dulces y otras alternativas. Alrededor del 90 por ciento de las naranjas de Florida se utilizan para el jugo.
El consumo estadounidense de jugo de naranja fresca ha caído un 18 por ciento en solo cuatro años, según datos de Nielsen.
Al mismo tiempo, el aumento de las importaciones ofrece una competencia no deseada. Brasil, un gran productor de naranjas para jugo de naranja, podría ver un aumento en la producción del 55 por ciento este año en medio de condiciones climáticas favorables, según el USDA.