Estás en un bar, te sirven una cerveza “sin alcohol”, la bebes… te sientes relajado y un poco aturdido. No estás borracho, pero “algo pasa”. Si no ves el riesgo, sigue leyendo.
Licenciada en Farmacia con especialidad en I+D+i e Industria, y con máster en biotecnología, innovación y seguridad alimentaria. Trabaja desde hace 10 años en la industria alimentaria, tanto en departamento de calidad, como directora de I+D+i y actualmente como directora técnica, teniendo formación como auditora en BRC, IFS, ISO 22000 e ISO 9001.
Es profesora asociada en el Grado de Nutrición y Dietética de la Universidad Europea Miguel de Cervantes en las asignaturas Legislación alimentaria y Política alimentaria.
También como Miembro del equipo docente en el Máster en Biotecnología, Innovación y Seguridad Alimentaria y en el Curso Universitario Especializado en Cocina Industrial.
Entre sus actividades divulgativas están la colaboración con la plataforma de divulgación científica: Naukas, Desgranando Ciencia, Salud sin Bulos, así como en diferentes medios de prensa escrita como Atresmedia y Revista Mía. Radio con una sección sobre alimentación y seguridad alimentaria en Radio Nacional de España en el programa Gente Despierta y televisión en TV CyL 8 dentro del programa “Vamos a ver”.
Autora del libro “No comemos como antes, y menos mal” de Ed. Paidós.
Estás en un bar, te sirven una cerveza “sin alcohol”, la bebes… te sientes relajado y un poco aturdido. No estás borracho, pero “algo pasa”. Si no ves el riesgo, sigue leyendo.
Hay dos tipos de personas: las que comen el plátano cuando está perfectamente amarillo, y las que lo dejan pasar al punto de convertirse en materia prima para bizcocho... pero a partir de ahora habrá otro tipo más.
Nos hemos pasado años hablando de qué comemos: proteínas, carbohidratos, grasas buenas, grasas malas, gluten sí, gluten no, azúcar fuera, azúcar dentro pero solo si es de dátiles… Y al final son patrañas.
España propondrá a la Unión Europea eliminar el cambio de hora a partir de 2026. Según el Gobierno, esta práctica "apenas ayuda a ahorrar energía" y tiene un "impacto negativo" en la salud y en la vida de los ciudadanos.
Ha pasado con los ensayos clínicos, con las enfermedades como el infarto y ahora también con la nutrición ¿Has tomado un vaso de leche y has pensado: “a mí esto no me sienta igual que a él (o ella)”? Puede que no sea tu imaginación.
Ahora que vas a los lineales y la oferta de yogures es extraordinaria, la ciencia te trae uno más, además con un sabor único. La clave es que está hecho por... hormigas.
Un estudio longitudinal en China relaciona el consumo frecuente de picante con órganos más “jóvenes”. Los investigadores advierten: no es magia, es solo una asociación estadística. ¿Rejuvenece el picante?
Ha vuelto a pasar. Trump ha sugerido que tomar paracetamol en el embarazo causa autismo. La evidencia científica lo niega: no hay pruebas sólidas y los expertos recuerdan la importancia de no caer en bulos.
El titular es jugoso. Ya está, estamos comiendo bolsas del súper versión puré. Pero espera, como siempre, la historia completa es un poco más larga y mucho menos apocalíptica.
Durante años circula el rumor de que los equipos de gimnasio tienen 362 veces más bacterias que un inodoro. Este es el origen real del mito y cómo mantener la higiene sin alarmismos.
La evidencia científica muestra que la salud intestinal influye directamente en el aumento del riesgo de enfermedades neurodegenerativas, abriendo nuevas vías para la prevención y la medicina personalizada.
Revolución golosa: el chocolate no solo nace del cacao, son unos pequeños organismos los que transforman su sabor. Un estudio revela cómo controlarlos podría iniciar una revolución gastronómica con tabletas más deliciosas y consistentes.
Dejar una botella de agua al sol en el coche parece inofensivo, pero en realidad es un cóctel de plásticos migrados, microplásticos, bacterias y mal sabor: no es nada recomendable.
Este verano, los incendios que arrasan España no solo destruyen bosques: el humo libera partículas PM2.5 que viajan kilómetros, degradan el aire y ponen en riesgo directo nuestra salud.
Nunca es tarde para la salud, pero hay que hacerlo. Harvad confirma que comer bien a partir de los 40 no sólo previene enfermedades también aumenta las probabilidades de llegar a los 70 con salud física, mental y autonomía.
En verano hay cosas que nunca fallan: el calor, la arena hasta en los calcetines... y los bulos. Aparecen en conversaciones de chiringuito, en la playa o en la voz de esa tía que lo sabe todo porque lo ha visto en TikTok.
Cada vez más estudios apuntan a que ciertos alimentos ultraprocesados pueden generar comportamientos parecidos a una adicción. La ciencia empieza a considerar el placer de comer como algo más complejo de lo que parece.
Las superbacterias avanzan silenciosas, amenazan con millones de muertes y un impacto económico global sin precedentes. Frenarlas depende de un uso responsable de antibióticos y políticas sanitarias efectivas.
Antes de irte de vacaciones abres el botiquín que tenías el año pasado y te encuentras el ibuprofeno caducado, que estaba en el coche al sol, ¿es un riesgo? Tu salud empieza por ordenarlos.
Con el calor, comer pesado es como ponerse abrigo en la playa. Aquí tienes qué alimentos elegir —y cuáles evitar— para sentirte ligero, hidratado y con energía en verano.