Algunas consideraciones sobre las irrupciones de frío intenso de los próximos días ¿Ola de frío a la vista?

Enero es el mes más frío del año, desde el punto de vista climatológico, seguido de febrero y diciembre. Y en este año, enero muestra su fría tarjeta de presentación.

En esta entrada sólo nos centraremos en los aspectos térmicos de los próximos días.

Bajada térmica en dos tiempos

El descenso térmico se va a producir en dos tiempos cronológicos que se van a describir a continuación. Para ello utilizaremos los mapas de anomalías de temperaturas a 850 hPa (1.500 m aproximadamente) como buenos indicadores de las irrupciones de aire frío, AF.

Irrupción polar marítima

Durante el 4 y 5 de enero de 2024 se va a producir una entrada y paso de una vaguada polar por el noroeste acompañada de aire polar marítimo y húmedo, en su origen, que va a atravesar la Península afectando a ella con precipitaciones, viento, descenso de temperatura, mala mar, e incluso con nevadas. AF1 es la masa indicativa de esta primera entrada fría.

Aquí se producirá el primer escalón descendente de temperaturas, nada del otro mundo para ser enero.

Irrupción ártica continental ¿Ola de frío a la vista?

Tras el paso de la vaguada activa se formará una borrasca en el Mediterráneo occidental y , a la vez, un anticiclón sobre la zona de las islas Británicas. De esta forma se creará un corredor de vientos de componente norte-noreste que nos traerá una masa de aire más seca y más fría, AF2.

Afortunadamente, el frío gélido ruso-siberiano se quedaría muy lejos de nosotros y sólo nos afectaría colateralmente.

Esta situación podría extenderse desde el 6 al 11 de enero, subjetivamente. Este brote de aire gélido podría ser algo extenso y duradero, pero no excesivamente intenso. Estos tres criterios cuantificados técnicamente, y la vez, son los que deben cumplirse para que un episodio sea caracterizado por ola de frío por AEMET.

A la vista de las predicciones actuales, la entrada fría de los próximos días podría cumplir los dos criterios de extensión y duración pero estaría fuera en cumplir el criterio de intensidad, con las predicciones actuales.

Hay que hacer notar que los modelos numéricos de predicción han ido reduciendo la entrada gélida en intensidad y extensión desde las sucesivas predicciones pasadas hasta hoy, afortunadamente.

En resumen, independientemente o no de que estemos en la primera ola de frío del invierno de 2024 (que probablemente no los será), vamos a entrar en un periodo de descenso de temperaturas en dos fases diferenciadas, del 4 al 5 de enero, la primera y desde el 6 hasta el 11 de enero, al menos, la segunda. A partir del 6 de enero, día de Reyes, el descenso térmico será más acusado que el primero. Por lo tanto, tiempo invernal en toda regla con precipitaciones, algunas en forma de nieve, viento, mala mar, heladas y desplome de los termómetros.

Una vez más, Canarias queda fuera de esta situación.