Lo qué no te han contado nunca de las DANA: Parte II

 ¿Por que es difícil predecir el desplazamiento de una DANA? ¿Dónde dejará precipitaciones? ¿Por qué tanta incertidumbre en su  evolución? …Veamos algunos detalles “privados” de las DANA

Mapa de superficie donde se muestran tres bajas mesoescalares que pueden interaccionar con una DANA, de oeste a este: baja del núcleo frío, baja peninsular, baja mediterránea. Todas ellas pueden interacciona con la DANA en altura
Mapa de superficie donde se muestran tres bajas mesoescalares que pueden interaccionar con una DANA, de oeste a este: baja del núcleo frío, baja peninsular, baja mediterránea. Todas ellas pueden interacciona con la DANA en altura

Consulta la Parte I de este artículo

DANA: aislada pero menos

En cuanto se forma la DANA en niveles altos su circulación ciclónica rica en vorticidad (giro) comienza a generar “por simpatía” una baja en superficie, tanto más profunda cuanto más estacionaria sea la DANA.

La explicación teórica y compleja se sale fuera de estas líneas conceptuales. Se va realizar una explicación de forma resumida.

Debido a que la presión es baja en la vertical de la DANA, la presión comienza a caer en superficie. La baja incipiente en superficie no suele reflejarse inicialmente en los mapas, sobre todo si la DANA se va desplazando conducida por los máximos de viento.

Cuando la DANA se hace casi estacionaria, la baja en superficie va tomando forma. Es como si en una taza de café o vaso transparente de agua agitamos con una cuchara la parte superior de la superficie. Con el tiempo, el giro/vorticidad se traslada hacia el fondo y por “simpatía” aparece otro centro de rotación y baja presión en el fondo del vaso. Si esl líquido es poco denso (inestable), el giro (vorticidad) de la parte superior se traslada más fácilmente a la inferior.

Por otra parte, en meteorología hay cierta similitud con la teoría de cargas y su campo eléctrico. Así, si se carga eléctricamente una de las placas de un condensador separadas por un dieléctrico no aislante, entonces aparecen otras en la placa opuesta y distante. La presencia de una carga en una placa induce con el tiempo carga de signo opuesto en la otra placa, si el dieléctrico lo permite. Las cargas interaccionan a través de sus campos eléctricos en el espacio aunque estén separadas. Algo similar ocurre con las DANA (y en los ciclones en general) .

La presencia de una DANA (equivalente una carga eléctrica) en altura tiende a inducir otra baja en superficie (otra carga) en un medio como es la troposfera (dieléctrico). Si la DANA es intensa y la atmosfera de abajo de ella es algo inestable (dieléctrico no aislante) entonces aparece una baja en superficie (otra carga)

De esta forma la DANA se aísla de la región madre polar, pero comienza interaccionar con la troposfera que la rodea, especialmente la que queda debajo ella. Ya no está tan aislada como parece e interacciona con la baja mesoescalar en superficie que se forma debajo de ella. Cuando en superficie se refleja claramente la baja, a la DANA se le denomina borrasca fría aislada.

Al generar interacciones de mesoescala, los modelos de predicción no captan en detalle la formación de la baja en superficie y las interacciones DANA- baja en superficie. Pero aún más, en muchas ocasiones la DANA (o ya borrasca fría aislada) desarrolla convección en su seno por convergencias locales de la baja en niveles bajos e inestabilidad de tipo térmico en su propio seno: puede aparecer la convección del núcleo frío.

Una vez más, los modelos de predicción no reproducen estos procesos con fidelidad: formación de la baja en superficie, interacción DANA-baja en superficie y convección de núcleo frío. Todos estos procesos tienden a erosionar a la DANA.

Las DANA cercanas a la Península

Pero aún más, las DANA o borrascas frías aisladas que llegan por el oeste a la Península interacciona con la orografía (Península) o con las altas montañas del Atlas marroquí creando bajas mesoescalares en superficie que en determinadas ocasiones sufren un proceso de profundización muy acusado (ciclogénesis) corriente abajo y lejos de la DANA. Esta nueva baja orográfica puede interaccionar con la DANA y puede generar focos convectivos muy intensos. El resultado es que la DANA y la baja en superficie interaccionan (aún estando lejos, como las cargas eléctricas) tratándose de poner en vertical ambos sistemas. En dicho proceso hay dos elementos significativos: la DANA se ralentiza y se va erosionado. Esta interacción es mayor en circunstancias de fuerte inestabilidad (mejor dieléctrico)

Una vez más nos encontramos con incertidumbres inherentes al desplazamiento de la DANA, la formación de la baja en superficie, las interacciones DANA-bajas en superficie y dónde se podrán desarrollar los focos convectivos que pueden generar precipitaciones intensas.

Continuará..

Francisco Martín León, meteorólogo

Esta entrada se publicó en Actualidad en 29 Ago 2017 por Francisco Martín León