Samuel Biener sorprendido ante los cambios en el mar Mediterráneo: "se ha producido un vuelco térmico por este fenómeno"

Aunque estos días se está hablando del bajón térmico y de las lluvias muy fuertes que ha dejado la vaguada que ha cruzado España, las temperaturas del Mediterráneo han experimentado un giro radical.

En algunas zonas de la Costa Brava la temperatura del mar se ha desplomado en los últimos días.

Nos adentramos en el ecuador de la canícula, el período estadísticamente más cálido y seco del año en la mayor parte de España, con un panorama no muy habitual para las fechas. Tras el paso de esta última vaguada, que ha dejado lluvias y tormentas muy intensas en zonas del este y Baleares, las temperaturas han caído de forma generalizada.

De hecho, la situación meteorológica recuerda más bien a principios o finales del verano, con un chorro polar ondulado y la llegada de ondas que provocan descensos térmicos y episodios tormentosos. En las últimas jornadas se han llegado a registrar algunas heladas en zonas de montaña, algo que ya se había vuelto muy raro en años recientes en plena canícula.

Importante bajón de la temperatura del Mediterráneo español

Aunque evidentemente estas temperaturas y lluvias anómalas para finales de julio son las grandes protagonistas, no hay que perder de vista el cambio que está experimentando la temperatura superficial del Mediterráneo desde mediados del mes, al menos en la cuenca occidental. Después de los registros de récord de junio y principios de julio, la situación ha cambiado, enfriándose rápidamente en ciertos sectores.

De acuerdo con los datos de Puertos del Estado y SOCIB, en las boyas del Mediterráneo español se han medido caídas de 2 a 4 ºC de la temperatura superficial marina. Especialmente llamativo ha sido el caso del golfo de León, cuyas aguas en estos momentos están más frescas que las del mar Báltico, como explicamos ayer en las redes sociales de Meteored.

No obstante, las boyas de cabo de Palos, golfo de Valencia, Baleares y sur de Cataluña siguen marcando registros de 26 a 28 ºC, valores bastante elevados, pero ya no hablamos de cifras de récord. En cambio, en el punto de medición del cabo de Begur la temperatura se ha desplomado hasta los 21,5 ºC en las últimas horas, según Puertos del Estado.

¿Cuáles son las causas de este "refrescamiento marino"?

Tras el calor extremo y los vientos débiles del pasado mes de junio, estas semanas se han sucedido episodios de vientos del norte-noroeste (tramuntana), lo que ha provocado afloramientos de aguas frías y profundas en el entorno del golfo de León y sectores próximos, dando lugar a un vuelco térmico. También en varias jornadas el levante ha soplado con fuerza, removiendo las capas o estratos, lo que ha acabado generando un refrescamiento del agua.

Los afloramientos fríos persistirán en las siguientes jornadas en el golfo de León, litorales gallego y portugués, y en el entorno del Estrecho-Alborán.

A esto hay que añadir las tormentas, con más días nublados y temperaturas no tan altas como las de junio. Esta combinación de factores va a reducir bastante (ya lo está haciendo) las anomalías cálidas de récord que presentaba el Mediterráneo occidental en estas últimas semanas. A medio y largo plazo se observa la persistencia del predominio de los nortes-norestes, con posibles nuevas vaguadas que traerían más tormentas.

Afloramientos de aguas muy frías en otras zonas de nuestras costas

Asimismo, resulta muy curiosa la situación que está dándose estos días en las costas gallegas, donde el persistente nordés está provocando importantes afloramientos de aguas muy frías y profundas, con una temperatura del agua que se ha desplomado por momentos hasta situarse por debajo de los 15 ºC en A Guarda o Langosteira. Estos son valores más fríos que los que tienen ahora por ejemplo en las islas británicas o puntos de Escandinavia.

También llama la atención lo que está pasando en el Estrecho, donde está entrando agua fría desde el Atlántico y produciéndose afloramientos fríos en la costa mediterránea andaluza, con una temperatura del mar que ronda o baja de los 19 ºC en Málaga o Tarifa, mientras que sobrepasa ligeramente los 21 ºC en el entorno del cabo de Gata.