El tiempo de Semana Santa 2018: así podría ser

Aún faltan un par de semanas, pero ya podemos empezar a hablar del tiempo previsto en la Semana Santa 2018. Aportamos antecedentes y una primera predicción del modelo europeo. Aún poco fiable.

Procesión del Cristo el Viernes Santo en Sevilla. Foto de José Manuel de Laá Artacho.

En los últimos días ya ha empezado el goteo de predicciones que tratan de poner luz al tiempo de la última semana de marzo, este año vacacional por excelencia al albergar la Semana Santa. Hay mapas con nubes, lluvias, tormenta, sol y calor, un popurrí propio de los pronósticos a largo plazo. Y más en estas fechas. Cuando arranca la primavera las masas de aire se tornan inestables, un sube y baja que deja los armarios patas arriba.

Las predicciones más fiables son aquellas que no sobrepasan los 3 días; a una semana hablamos de tendencias y a 15 días… ¡de un brindis al sol! Marzo, además, es una auténtica ruleta rusa. Ya lo dice el refranero: Marzo marceador, llueve por la tarde y por la mañana hizo sol. También el archivo histórico, que evidencia que el tiempo de Semana Santa en estas fechas “no es de fiar”.

Semana Santa a finales de marzo

La referencia más próxima la tenemos en 2016. Hace dos pascuas el tiempo se mostró inestable. La semana arrancó con una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), o gota fría, merodeando el oeste peninsular. La DANA confiscó los grandes claros, dejando muchos días grises y frescos. El tiempo de la Semana Santa en Sevilla acumuló 27mm en 4 días de lluvia y en Oviedo algo más de 41mm. Los paraguas además llegaron acompañados por chaquetas, con temperaturas máximas inferiores a los 20ºC.

Un año antes los cofrades habían sudado tinta. La Semana Santa, que cayó entre el 29 de marzo y el 5 de abril, se caracterizó por el tiempo estable y, en algunas zonas, ¡casi estival! En los primeros días de abril el suroeste de Andalucía alcanzó temperaturas máximas de entre 30ºC y 32ºC. Las mangas cortas poblaron el periodo vacacional, que lució muchas sombrillas y muy pocos paraguas.

Dicen que siempre llueve en Semana Santa. La primavera lo hace sin acritud. Foto: Diario 16.

La Semana Santa de 2013 se ajusta a las mil maravillas a la de este año. Por las fechas y porque también llegaba tras un periodo de circulación zonal, esa que trae viento del oeste y muchos frentes con lluvias. Los días festivos continuaron por esos mismos derroteros: precipitaciones abundantes y persistentes en Galicia, Extremadura, las montañas de Andalucía, Sistema Central e Ibérico, y temperaturas suaves. En el resto más débiles e intermitentes. Muchas ciudades del noroeste peninsular acabaron con cerca de 100mm; Madrid o Sevilla recogieron una veintena.

Conclusión, y una pequeña predicción

Con los datos históricos en mano concluimos que puede pasar casi de todo en el tiempo de la Semana Santa . Desde tener un ambiente fresco y mucha lluvia, hasta caluroso y playero. De momento el modelo europeo de predicción (ECMWF), en sus proyecciones a largo plazo, apuesta por una Semana Santa 2018 con tiempo fresco y húmedo en la mitad occidental peninsular. A tenor de lo que muestran sus mapas de anomalías, aún muy poco fiables, parece que en la última semana de marzo continuarán entrando frentes por el oeste con lluvias en la vertiente atlántica de la Península y cercanías.

En el resto del país el ECMWF anticipa precipitaciones por debajo del promedio y temperaturas algo más calurosas, sobre todo en el litoral mediterráneo peninsular y Baleares. En Canarias el ambiente quizás será un pelín más fresco de lo habitual, pero seco. Esto es lo que dicen hoy, mañana ya se verá. Y lo contaremos.