Los hayedos más espectaculares de España para visitar en otoño

El otoño tiñe los bosques españoles de tonos dorados, ocres y rojizos. Entre ellos, los hayedos destacan como auténticos templos naturales. Descubre los más impresionantes para disfrutar de paseos inolvidables bajo un manto de hojas secas y silencio.

El magnífico Hayedo de la Tejera Negra, en Guadalajara, en todo su esplendor otoñal.

Cuando las primeras lluvias otoñales refrescan el aire, los bosques españoles se transforman en un espectáculo cromático que atrae a fotógrafos, senderistas y amantes de la naturaleza.

Entre ellos, los hayedos —bosques dominados por el haya común (Fagus sylvatica)— se convierten en escenarios casi mágicos, donde la luz tamizada y la alfombra de hojas crean una atmósfera que parece de cuento.

Los hayedos más impresionantes en otoño en España

España cuenta con algunos de los hayedos más bellos del sur de Europa, ideales para recorrer a través de maravillosos senderos en una escapada otoñal.

Hayedo de Montejo (Madrid)

Ubicado en la Sierra del Rincón (entre las de Ayllón y Guadarrama), declarada Reserva de la Biosfera por la UNESCO, el Hayedo de Montejo es el más famoso de la Comunidad de Madrid.

El madrileño Hayedo de Montejo posee un gran valor ecológico y estético.

Su reducido tamaño (apenas 250 hectáreas) contrasta con su gran valor ecológico y estético. Las visitas están reguladas y se realizan con guía, lo que garantiza la conservación del entorno.

Durante octubre y noviembre, el bosque se cubre de tonos ocres y rojizos que reflejan la luz como en ninguna otra época del año. Es un destino ideal para una escapada de día desde la capital de España.

Hayedo de Tejera Negra (Guadalajara)

Dentro del Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara, este hayedo, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, sorprende por su localización, en una zona más seca de lo habitual para esta especie.

El Hayedo de Tejera Negra se extiende por el valle del río Lillas, y sus senderos circulares —como el de Carretas y el del Robledal— son perfectos para explorar sus contrastes.

En otoño, el suelo se cubre de hojas doradas y musgo, y el murmullo del agua acompaña cada paso. Es uno de los mejores lugares para contemplar la transición entre el bosque atlántico y el mediterráneo.

Hayedo de Otzarreta (País Vasco)

En el Parque Natural de Gorbeia, entre Bizkaia y Álava, el Hayedo de Otzarreta es uno de los más fotogénicos de España.

Mágico paisaje otoñal del Hayedo de Otzarreta, en el Parque Natural de Gorbeia, en Álava.

Sus hayas, de troncos cubiertos de musgo y ramas retorcidas que crecen hacia el cielo, parecen salidas de una pintura surrealista.

El pequeño arroyo que lo atraviesa multiplica su encanto, sobre todo en los días de niebla. Este rincón mágico es un paraíso para los fotógrafos de naturaleza y para quienes buscan un paseo breve pero inolvidable.

Hayedo de Ordesa (Huesca)

El Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido alberga uno de los hayedos-abetales más espectaculares del Pirineo.

Caminar en esta época del año por el Hayedo de Ordesa es una experiencia impagable.

Aquí, además del espectacular bosque, pueden contemplarse cascadas, acantilados y montañas que se elevan hasta los tres mil metros.

En otoño, el contraste entre las hojas doradas del hayedo, el verde oscuro de los abetos y el blanco de las cumbres nevadas crea una paleta de colores irrepetible.

Las rutas hacia la Cascada de la Cola de Caballo o la Faja de Pelay son perfectas para disfrutar de la estación en su máximo esplendor.

Hayedo de la Pedrosa (Segovia)

A las puertas del Puerto de la Quesera, entre Segovia y Guadalajara, en el este del Sistema Central español, se encuentra el Hayedo de la Pedrosa, un bosque menos conocido que los anteriores, pero igualmente impresionante.

Su acceso es libre y sus senderos se adentran en un paisaje de montaña donde las hayas conviven con robles y acebos.

Es un lugar tranquilo, ideal para quienes buscan una experiencia más solitaria y auténtica, lejos de los hayedos más concurridos.

Hayedo de Busmayor (León)

En el Bierzo leonés, el Hayedo de Busmayor combina belleza natural y tradición rural. El recorrido circular de unos siete kilómetros, absolutamente recomendable, permite descubrir cascadas, fuentes y miradores.

La humedad constante favorece la presencia de musgos y helechos que tapizan el suelo, creando una atmósfera realmente mística para acompañar un otoño que allí se vive con intensidad pero sin prisas.

Consejos para disfrutar de los hayedos en otoño

Recorrer un hayedo en otoño es mucho más que un paseo: es una experiencia sensorial completa, un verdadero encuentro con la naturaleza en un estado tan efímero como bello y poético.

Para disfrutar al máximo, es importante tener en cuenta estos consejos.

  • Planifica tu visita: algunos hayedos, como el de Montejo, requieren reserva previa.
  • Evita los días y horas punta: recuerda que los fines de semana suelen ser los más concurridos.
  • Respeta el entorno: no salgas de los senderos marcados ni recojas hojas o setas sin autorización.
  • Lleva ropa adecuada: ten en cuenta que las temperaturas pueden bajar bruscamente y el terreno suele estar húmedo.

No te pierdas la última hora de Meteored y disfruta de todos nuestros contenidos en Google Discover totalmente GRATIS

+ Seguir a Meteored