La Niña podría desarrollarse entre junio-agosto de 2024 impactando en el pico de la estación de huracanes del Atlántico

Una transición de El Niño a ENSO-neutral es posible el próximo mes. La Niña pudiera desarrollarse en junio-agosto (49% de probabilidad) o julio-septiembre (69% de probabilidad)

Anomalías de la temperatura del agua del mar en el Pacífico con anomalías frías/cálidas en tonalidades azules/rojas. Ya aparecen anomalías frías en la zona ecuatorial central y oriental con las señales de una La Niña en el horizonte. Climate Reanalyzer.

Estatus del Sistema de alerta del ENSO, según Climate Prediction Center de la NOAA

Durante abril de 2024, las temperaturas ecuatoriales de la superficie del océano (SST, por sus siglas en inglés) bajo el promedio se desplazaron en regiones pequeñas del este del Océano Pacífico ecuatorial [Fig. 1].

Los valores más recientes semanales de índice de Niño permanecieron entre +0.5°C y +0.8°C en todas las regiones, excepto para Niño-3 que estaba en +0.3°C [Fig. 2].

Las temperaturas en la subsuperficie del mar se mantuvieron estables durante el mes (índice del área promediada en [Fig. 3]), con anomalías negativas extendiéndose desde la Línea del Cambio de Fecha hacia el este del Océano Pacífico [Fig. 4].


Las anomalías en los vientos en los niveles bajos estuvieron del este sobre el oeste del Pacífico ecuatorial, mientras que los vientos en los niveles altos estuvieron cerca del promedio. La convección estuvo cerca del promedio en general a través del Océano Pacífico ecuatorial e Indonesia [Fig. 5].

Colectivamente, el sistema acoplado océano-atmósfera reflejó una continuación de debilitamiento de El Niño y transición hacia ENSO-neutral.

Los pronósticos más recientes de IRI favorecen una transición inminente hacia el ENSO-neutral con La Niña desarrollándose durante julio-septiembre 2024 y luego persistiendo hasta el invierno del Hemisferio Norte [Fig. 6].


El equipo de pronosticadores continúa favoreciendo la guía dinámica de modelos, lo que sugiere que La Niña pudiera formarse tan temprano como junio-agosto 2024, con mayor confianza en La Niña durante las próximas temporadas.

La Niña generalmente tiende a seguir eventos fuertes de El Niño, lo que también provee confianza en la guía de modelo favoreciendo La Niña.

En resumen, una transición de El Niño a ENSO-neutral es probable en el próximo mes. La Niña pudiera desarrollarse en junio-agosto 2024 (49% de probabilidad) o julio-septiembre (69% de probabilidad; [Fig. 7]).

La Niña se afianzará en el periodo de pico de actividad en la estación de huracanes en el Atlántico Norte, ASO, agosto, septiembre y octubre, por lo que afectará positivamente a la estación de este año, ya que tiende a disminuir la cizalladura/cortante del viento en la zona, factor favorable para el desarrollo y mantenimiento de ciclones tropicales.

Esta entrada se publicó en Actualidad en 13 May 2024 por Francisco Martín León