Titán puede ser el lugar más animado del sistema solar por diferentes motivos

El agua no es el único líquido del universo. Titán no tiene agua líquida en su superficie. Pero sí tiene líquidos: mares, lagos, arroyos, ríos… de metano y etano. Es tan considerable que la presión del aire en la superficie es un 50 % mayor que la de la Tierra, a pesar de que Titán es muchísimo más pequeño que nuestro planeta.

Esa atmósfera está compuesta casi en su totalidad de nitrógeno, con una fracción considerable de metano. Pero la radiación ultravioleta del sol reacciona con ese nitrógeno y metano para producir una amplia variedad de otras moléculas, como acetileno, cianógeno, benceno, propano y sus derivados.

Y todo esto, todo esto, está operando a una temperatura de alrededor de -180 grados Celsius, o alrededor de -300 grados Fahrenheit.

Titán es único

A estas temperaturas y presiones, los metanos y etanos permanecen líquidos. Y es posible —y quiero enfatizar mucho la palabra posible— que estos líquidos sirvan como disolvente para la vida.

Titán lo tiene todo. No es agua, sino un disolvente líquido para el desarrollo de la vida. Posee una abundante fuente de energía: la radiación ultravioleta del sol. Posee una química extremadamente rica con una amplia y diversa gama de compuestos. Y posee la física: temperaturas y presiones que permiten la química compleja y el movimiento de materiales, mediante la precipitación y el viento, para mezclarlos.

Si hay vida en Titán, es diferente de cualquier forma de vida similar a la de la Tierra a un nivel bioquímico profundo y fundamental. No se trata de vida basada en el agua. Es vida basada en el metano. En lugar de consumir oxígeno o dióxido de carbono , la vida basada en el metano consumiría hidrógeno o acetileno. De hecho, la evidencia de la sonda espacial Cassini de la NASA y la sonda Huygens, que aterrizó en la superficie en 2005, revela producción de hidrógeno y acetileno en la atmósfera, pero luego una escasez cerca de la superficie.

Claro, hay muchas maneras de eliminarlos de la atmósfera a menor altitud. Pero quizás... solo quizás... se los esté comiendo.

De hecho, incluso podría ser posible construir membranas celulares utilizando la química exótica de Titán. En la Tierra, la mayoría de la vida utiliza fosfolípidos para construir membranas, pero estos escasean en el ambiente frío y tóxico de Titán. En cambio, la vida en Titán podría construir azotosomas, membranas hechas de acrilonitrilo, aunque otras investigaciones sugieren que estos compuestos simplemente forman hielo en lugar de membranas flexibles y semirrígidas.

La vida en Titán no sería precisamente... emocionante. Sería emocionante encontrarla, pero las temperaturas extremadamente bajas impiden un metabolismo rápido. Es casi seguro que, si hay vida, es tan simple y lenta que podría ser irreconocible.

Por si fuera poco, Titán guarda un secreto. La atmósfera y los lagos de metano se asientan sobre una corteza de hielo de agua. Algunos modelos informáticos sugieren que bajo esa corteza se esconde un océano de agua líquida. Este océano no sería tan prístino como el de Europa, ya que probablemente sería extremadamente rico en amoníaco. En la Tierra, este sería un entorno completamente tóxico. Por lo tanto, en el posible océano de Titán, la vida no solo tendría que superar la falta de luz solar, sino también un entorno complejo para sustentar las funciones biológicas.

Pero bueno, no podemos descartarlo, al menos no todavía. En 2028, la NASA planea lanzar la misión Dragonfly a Titán, un helicóptero diseñado para aterrizar en sitios, estudiarlos y luego saltar a otro lugar. Como con todas las demás misiones diseñadas para buscar vida, las esperanzas de encontrarla son, sinceramente, escasas. Pero pase lo que pase, aprenderemos mucho sobre la química en otros mundos, e incluso podríamos aprender sobre cómo surgió la vida en la Tierra... pero ese es otro episodio.

Fuente: Universe Today