Balance mensual: “Marzo muy lluvioso, año doloroso”

Una vez más el refranero sentencia claramente lo que nos puede suceder tras este mes excepcionalmente húmedo en la Península y en Baleares, además de tener unas temperaturas altas para estas fechas. Veamos con detalle lo sucedido durante marzo.

Bárig, comarca de la Safor, Valencia.
La especial orientación, con apertura hacia el mar en dirección nordeste, junto con el relieve accidentado, han provocado grandes lluvias en la comarca de La Safor, provincia de Valencia. En la imagen la localidad de Bárig, uno de los mayores núcleos de precipitación con cerca de 900 l/m2.

Empezábamos marzo con los mismos trazos de los meses anteriores, con precipitaciones solo en el tercio norte peninsular y termómetros relativamente elevados para la fecha en la que nos encontrábamos. Sin embargo, casi a mediados de mes, se produjo un cambio radical de la situación atmosférica, provocado por la borrasca de gran impacto Celia, que trajo grandes precipitaciones a las provincias de Málaga, Cádiz y a la zona del Sistema Central y que será recordada, sobre todo, por el episodio de intrusión de polvo sahariano que afectó a la mayoría de las regiones peninsulares y a Baleares.

Por decenas, la primera tuvo temperaturas elevadas en todo el país, con la salvedad de los valores nocturnos, algo más bajos de lo normal, en los extremos norte y sur peninsulares. Las precipitaciones fueron algo superiores a la media en la Península e inferiores en ambos archipiélagos.

Este mes de marzo será recordado por la borrasca Celia y las lluvias generalizadas de la recta final. En la primera, llamó especialmente la atención la intrusión de polvo sahariano que afectó a la mayoría de las regiones peninsulares y a Baleares.

La segunda decena vino marcada por los cambios producidos por la borrasca Celia, las temperaturas fueron claramente superiores a lo normal, salvo en las Canarias, donde se podrían considerar normales y en el extremo suroeste de la Península, que fueron algo inferiores. Las precipitaciones acabaron siendo superiores a la media en todas las comarcas.

Finalmente, el mes ha terminado con precipitaciones casi generalizadas, algo menos en el oeste de Galicia y en las islas orientales de Canarias. Las temperaturas han seguido la misma línea que durante el resto del mes, siendo superiores a la media en la mayoría de las regiones.

Nuevos récords de temperaturas nocturnas en España

Las máximas han sido superiores a los valores habituales de este mes en todo el país, salvo en el área levantina y puntos del archipiélago canario, que se las podría considerar como normales o ligeramente inferiores a su media del actual período. La situación cálida de mediados de mes y también otra, aunque algo menor, de finales, con la intrusión de polvo sahariano en ambas ocasiones, nos han dado temperaturas elevadas que no corresponden a las fechas en la que nos encontramos.

En estaciones de AEMET, el valor más alto mensual se alcanzó en Las Palmas de Gran Canaria, San Cristobal (Gran Canaria), el día 28 con 26,9 ºC. Ese mismo día, en la Península, la máxima se produjo en Zumaia, Guipúzcoa, con 26,0 ºC, situación producida por el viento sur dominante durante esa jornada.

Los valores nocturnos han sido muy superiores a lo normal en el conjunto de las regiones. En estaciones de AEMET, que no son de alta montaña, el dato más bajo mensual se produjo el día 24, en Martinet, Lérida, con -7,8 ºC. También es interesante mencionar que, durante la intrusión de polvo sahariano, las mínimas nacionales se produjeron en los observatorios de alta montaña de las islas Canarias, alcanzando los -5,1 ºC en Izaña el día 16.

Con las dos irrupciones cálidas se han vuelto a batir varios récords de temperatura mínima absoluta más alta. En todos los casos corresponden al día 15 y se trata de los aeropuertos de Murcia y de Almería con 17,8 ºC y 17,6 ºC, respectivamente.

Abundancia de precipitaciones

Este marzo ha sido extremadamente húmedo si consideramos el conjunto de España. Las zonas donde ha llovido mucho más de lo normal se han dado en la Comunidad Valenciana, con núcleos cercanos a los 800 l/m2, más del 1000% de lo normal para este mes. Por el contrario, ha llovido menos de lo habitual en puntos de Galicia, País Vasco y de ambos archipiélagos, con áreas que han rondado el 50% de lo normal, incluso algo menos en el sur de la isla de Gran Canaria.

Durante este mes se han batido numerosos registros de precipitación máxima absoluta en un día. Destacaré el observatorio de Segovia porque ha conseguido superar en dos ocasiones el dato anterior que era de 2014, el día 3 con 24,4 l/m2 y el día 29 con 26,6 l/m2.

Otras variables meteorológicas que hay que destacar son el viento, que ha soplado con mucha intensidad en casi todas las regiones, con rachas verdaderamente huracanadas, como la medida en Izaña, Tenerife, de 169 km/h, cerca de su récord absoluto de 176 km/h. Y las horas de Sol, que han sido mucho menores de lo habitual para este mes.

Consideraciones finales

Hemos terminando el invierno y todo apunta a que el característico bloqueo anticiclónico de esta estación ha quedado roto por esta serie de borrascas que han conseguido regar la mayoría de las comarcas. En situación atmosférica normal de inicio de primavera, el tiempo debería ser mucho más activo que durante la pasada estación y los temporales atlánticos tendrían que continuar alcanzando a la Península.

El porcentaje de humedad del suelo ha dado un vuelco y en la mayor parte de la Península hay valores superiores al 98%. Sin embargo, el agua embalsada sigue un 20% por debajo de la media de los últimos diez años.

El porcentaje de humedad del suelo sobre su capacidad máxima ha dado un vuelco completo durante este mes, estando en estos momentos por encima del 60% en toda España, salvo áreas pequeñas de las islas orientales de Canarias. Incluso en la Península, la mayor parte se encuentra con valores superiores al 98%.

Pero aún con esta situación, nuestras presas continúan con el problema de sus reservas, ya que el agua embalsada, a fecha de 29 de marzo, es de solo el 46,82% de su capacidad máxima, un 16% inferior a la misma fecha del año pasado y nos encontramos por debajo de la media de los diez últimos años, en este caso un 20%.