Arte helado en el estrecho de Sannikov

Al norte de Siberia continental, un conjunto de islas sobresalen del Océano Ártico. Con una extensión de 30.000 kilómetros cuadrados, las islas de Nueva Siberia están divididas en dos por el estrecho de Sannikov, que conecta el mar de Laptev (oeste) con el mar de Siberia oriental (este).

Arte Helado En El Estrecho De Sannikov

Durante la mayor parte del año, el estrecho se ahoga con hielo. Estas imágenes, todas adquiridas con el sensor Operational Land Imager en Landsat 8, muestran el agua de mar congelada en junio, ya que la temporada de deshielo en verano está en marcha. Las primeras dos imágenes muestran el hielo marino en el lado occidental del estrecho en 2018 y 2016, respectivamente. La tercera imagen (abajo) es del lado este y fue adquirida en 2013.

Arte Helado En El Estrecho De Sannikov
Arte Helado En El Estrecho De Sannikov

El estrecho de Sannikov es parte del Paso Noreste que conecta el Océano Atlántico y el Pacífico. A medida que el mundo se calienta y la extensión del hielo marino del Ártico continúa reduciéndose, se espera que la ruta sea cada vez más viable para el transporte en tránsito durante períodos más largos. En septiembre de 2018, un rompehielos acompañó a Venta Maersk a través del estrecho de 50 kilómetros de ancho durante un viaje entre Busan, Corea del Sur y San Petersburgo para determinar la viabilidad de la ruta.

El pasaje es actualmente navegable por unos pocos meses del año. Cuando se adquirieron estas imágenes, todavía era lo suficientemente temprano en la temporada para que persistiera el hielo.

Arte Helado En El Estrecho De Sannikov

Vientos, corrientes y derretimientos habían roto el hielo en algunos lugares. Las áreas negras son aguas abiertas. Las diferencias en el grosor del hielo son probablemente responsables de la variedad de colores, desde el gris al azul, que le confieren un aspecto delicado similar al de los vitrales.

Arte Helado En El Estrecho De Sannikov

Imágenes de NASA Earth Observatory por Lauren Dauphin, utilizando datos de Landsat del Servicio Geológico de los Estados Unidos. Texto de Kathryn Hansen.

NASA Earth Observatory

Esta entrada se publicó en Reportajes en 26 Nov 2018 por Francisco Martín León