Huracanes y cambio climático: lo que sabemos

El cambio climático se cruza con los huracanes al aumentar la lluvia torrencial, la intensidad y la oleada ciclónica. Climate Central lo cuenta.

Una atmósfera más calida provoca más evaporación, lo que significa que hay más agua disponible para la precipitación. Por cada 1 ° F de aumento de temperatura, la atmósfera puede contener alrededor del 4 por ciento más de vapor de agua, lo que conduce a lluvias más fuertes y aumenta el riesgo de inundación de ríos y arroyos.

Vimos el impacto de precipitaciones extremas durante Harvey. Aunque todavía no se ha hecho ninguna investigación para atribuir los sorprendentes totales de precipitación de esta tormenta tropical al cambio climático, los aguaceros están muy en línea con las fuertes tendencias de precipitación.

El agua cálida proporciona el combustible para los huracanes. El cambio climático ha calentado las aguas oceánicas alrededor del mundo en 1-3 ° F durante el siglo pasado, incluso en las regiones donde se desarrollan los huracanes. Esto permite que los huracanes crezcan más fuertes, aumentando potencialmente su velocidad máxima del viento. Un estudio indica que los huracanes se están intensificando más rápidamente que hace 30 años.

Por supuesto, hay otros factores que pueden limitar la potencia de un huracán, como la cizalladura o variación del viento con la altura en la troposfera.

El calentamiento de los océanos y el derretimiento del hielo terrestre también han causado alrededor de siete pulgadas (18 cm) de aumento del nivel del mar global durante el siglo pasado. Esto hace la oleada de la tormenta o ciclónica más intensa, con lo que las inundaciones costeras que golpean repentinamente las tierras costeras sean más dañinas, ya que envía las aguas de inundación más altas y las empuja más tierra adentro. Eso a su vez puede causar más daños a las infraestructuras y pone vidas adicionales en riesgo.

Ya ha habido un aumento en la frecuencia y la intensidad de los huracanes más fuertes en el Atlántico desde que comenzó la era de los satélites. Mirando hacia el futuro, los huracanes proyectan producir más lluvia. También se espera que las tormentas tropicales más fuertes se vuelvan más comunes. Sin embargo, se prevé que la frecuencia general de huracanes sea casi la misma, o tal vez incluso disminuya.

Sept. 2017

Climate Central
https://www.climatecentral.org/
Esta entrada se publicó en Noticias en 26 Sep 2017 por Francisco Martín León