España bajo la amenaza de una verdadera 'ola de frío'

Tras el frente que nos cruzará en las próximas horas, llegará una masa de aire ártico que provocará temperaturas muy bajas al menos hasta el día de Reyes. Las heladas serán intensas y podrá nevar en sitios inusuales.

Quitanieves
Las heladas serán intensas y la nieve podría aparecer en sitios poco habituales hasta el día de Reyes.

En los últimos días hemos hablado mucho del frente que cruzará la Península y Baleares entre hoy y mañana. Irá progresando de noroeste a sureste, dejando precipitaciones que serán en forma de nieve en cotas medias. La incidencia será tal que se han activado avisos en numerosas provincias por las nevadas que, sin ser excesivamente importantes, sí que dejarán acumulados de hasta 5 centímetros en gran parte de los sistemas montañosos de la mitad norte peninsular y, mañana también, de los relieves orientales. Justo detrás de esta línea de nubes llegará una masa de aire de origen ártico que incrementará el frío que ya venimos padeciendo, hasta el punto de registrar, muy probablemente, una auténtica ola de frío.

Las olas de frío se mencionan en ciertos ámbitos con demasiada facilidad, más de lo que exige su concepto en España, formulado por la AEMET. Se define como un episodio de al menos tres días consecutivos donde como mínimo el 10% de las estaciones meteorológicas registran temperaturas extremadamente frías, debiendo estar dentro del 5% de datos más gélidos observados en el periodo 1971-2000. Esto restringe mucho sus apariciones. No toda advección fría del norte se convierte en ‘ola’, pero la que está llegando sí que parece especial, por su magnitud y la persistencia prevista.

Basta con mirar las anomalías anticipadas por el modelo europeo para ser conscientes de que no estamos ante un envite ártico cualquiera. A partir de mañana, y sobre todo a lo largo del fin de semana, la masa de aire que merodeará la Península Ibérica presentará temperaturas hasta 10 ºC más bajas de lo normal en estas fechas. Teniendo en cuenta que, de por sí, a finales de diciembre y en enero hace frío, este escenario anómalo dejará registros sobresalientes.

Se prevén para el lunes temperaturas mínimas de -10 ºC en la ciudad de Ávila y de -9 ºC en Cuenca. Helará casi en los litorales cantábrico y mediterráneo.

La madrugada del lunes, que previsiblemente acogerá el momento más gélido del episodio, traerá temperaturas mínimas de -10 ºC en la ciudad de Ávila, -9 ºC en Cuenca, -8 ºC Segovia y -6 ºC Madrid. En puntos altos de Pirineos, de la Cordillera Cantábrica y Sierra Nevada el mercurio se desplomará bastante más, hasta los -15 o -20 ºC. Las heladas serán intensas y muy extensas, llegando a rozar el litoral mediterráneo, sobre todo en su extremo más nororiental, y el cantábrico.

Sábado, domingo, lunes, martes y miércoles tendrán índices de pronóstico extremo (mapas EFI) muy reseñables en las temperaturas, que vendrán a exaltar el carácter inusual de los registros (valores del orden de -0,8/-0,9) durante bastante más de tres días. Tras las heladas del lunes, todo apunta a que los días 5 y 6 serán muy fríos. Si coincide con la llegada de nubes y precipitaciones, podría nevar en sitios poco habituales como la ciudad de Madrid o cerca del litoral oriental, donde parece que se concentrará la mayor inestabilidad.

La primera mitad de la semana que viene será muy gélida, con nevadas en sitios poco habituales. Podría ser el caso de la ciudad de Madrid.

Entonces, ¿cuándo podremos decir sin tapujos que llega una ola de frío? Básicamente, cuando la AEMET lo considere y emita una nota al respecto, al ver que los pronósticos superan de forma evidente los umbrales. Es fácil que la confirmación llegue pronto.