El abono casero y gratuito que muchos tiran sin saber que es oro líquido para las plantas
Hoy queremos compartir contigo una forma económica y sostenible de proporcionar nutrientes esenciales a nuestras plantas. Coge papel y toma nota de estos trucos de experto.

Durante el caluroso verano, además de las medidas a tomar en cuanto a nuestra salud, otras grandes perjudicadas pueden ser nuestras plantas, que también sufren, y mucho, en episodios de temperaturas muy elevadas. Es importantísimo mantenerlas adecuadamente hidratadas si queremos que se conserven en todo su esplendor.
El abono gratuito que transforma tus plantas sin gastar un euro
Y es que las altas temperaturas pueden provocar la deshidratación rápida de las plantas, especialmente las que se encuentran en macetas o en suelos poco retentivos. El agua es esencial para su crecimiento y desarrollo, pero no todas las fuentes de agua son iguales.
Si estarás muchos días fuera y no tienes riego automático, aquí te dejamos una idea para regar tus plantas. pic.twitter.com/i5X4vJ0iF5
— Chile Huerta (@ChileHuerta) December 8, 2024
Entre los métodos menos conocidos pero altamente efectivos para nutrir nuestras plantas se encuentra el uso del agua de cocción de huevos. Este líquido, que comúnmente se descarta después de cocinar huevos duros, contiene nutrientes valiosos que las plantas pueden absorber y aprovechar.
Rica en calcio y minerales esenciales, esta agua actúa como un fertilizante natural que refuerza la salud de las raíces y estimula el crecimiento. Además, al reutilizarla evitamos el desperdicio y contribuimos al cuidado del medio ambiente desde casa.
¿Cómo preparar y utilizar el agua de cocción de un huevo?
Para preparar y utilizar correctamente el agua de cocción de un huevo como fertilizante natural, simplemente cocina los huevos como lo haces habitualmente para obtenerlos duros. Una vez estén listos, retíralos con cuidado del agua para evitar que se rompan y deja que el líquido restante se enfríe completamente a temperatura ambiente.
Una vez fría, puedes regar con ella tus plantas de interior o del jardín. Este agua, cargada de minerales como el calcio y otros nutrientes liberados durante la cocción del huevo, actúa como un refuerzo natural que favorece el crecimiento, fortalece los tallos y mejora la salud general del sustrato.
Beneficios que aporta el agua de cocción de huevo
Uno de los grandes beneficios del agua de cocción de un huevo es su riqueza en calcio, esencial para el desarrollo celular y la fortaleza de tallos y hojas. Durante la cocción, este mineral se libera de la cáscara y se disuelve en el agua, convirtiéndose en un fertilizante natural que las raíces absorben fácilmente.

Además, al reutilizar este agua evitamos desperdiciarla, convirtiendo un simple residuo de cocina en un abono gratuito, ecológico y muy efectivo. Su uso regular mejora la estructura del suelo y favorece la absorción de nutrientes en plantas tanto de interior como de exterior.
Consejos para maximizar su efectividad
Para aprovechar al máximo los beneficios de este agua, lo ideal es incorporarla a la rutina de riego aproximadamente una vez por semana. Esta frecuencia es suficiente para aportar los nutrientes necesarios sin saturar el sustrato ni alterar el equilibrio de humedad.
Es importante recordar que no todas las plantas tienen las mismas necesidades. Por ello, conviene observar cada especie y ajustar la cantidad de agua según su tamaño, el tipo de tierra y la exposición al sol. Distribuir el agua de manera uniforme entre las macetas también ayuda a evitar que algunas reciban un exceso de minerales mientras otras se quedan cortas. Con un poco de atención y constancia, este sencillo gesto puede marcar una gran diferencia en la salud y el aspecto de tus plantas.