Sky View Factor o cuánto calor pasarás según el espacio entre fincas

¿Sabíais que la fracción de cielo que vemos desde el suelo determina muchas cosas en meteorología? Os lo mostramos con el ejemplo del "Sky View Factor", de gran importancia para analizar los microclimas urbanos.

Rascacielos en una gran ciudad
La disposición y cercanía de los edificios determinan la fracción de cielo visible

Hoy miramos hacia arriba rodeados de edificios en cualquiera de nuestras fantásticas ciudades: Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla o Palma de Mallorca, por ejemplo. En algunos casos, a veces resulta contemplar algo más que una estrecha franja del cielo.

¿Qué es el "Sky View Factor"?

La fracción de cielo visible que vemos desde la calle mirando hacia arriba es más importante de lo que parece. En eso se basa el "Sky View Factor" (SVF), un parámetro vital para medir el intercambio energético de la radiación entre la ciudad y la atmósfera. Se trata de un fenómeno extremadamente vinculado a la temperatura superficial, y condiciona la isla de calor urbano.

La función o aplicabilidad de esta variable la encontramos en los cálculos y modelizaciones de la isla de calor y a su vez, convertirse en herramienta para la mejora del diseño urbano y del espacio público.

La radiación solar con un terreno abierto, es decir, con un SVF elevado, llega a la superficie con facilidad y pocas barreras. Sin embargo, una calle en la ciudad tiene una fracción de cielo visible menor, con lo cual, la energía solar tiene "menos espacio" o más dificultad para llegar a la superficie, y también para "escapar".

Diferencias entre las ciudades y asentamientos dispersos

Una ciudad densa y con un urbanismo irregular y poco planificado, tendrá un SVF menor, es decir, desde el suelo la percepción será que hay "poco cielo abierto". Esto es un factor negativo porqué condiciona o determina el balance energético de entrada y salida y especialmente porque las ondas radiativas tienen más dificultad para "escapar".

En asentamientos dispersos como urbanizaciones la energía solar puede escaparse con más facilidad. Sin embargo, este modelo es más agresivo con el territorio.

En cambio, en asentamientos dispersos tendremos una fracción de cielo visible mucho mayor. Dicho de otro modo, como peatones tendremos una percepción de "amplitud" y apertura, de tal modo que veremos mucho "azul" mirando arriba. Este modelo urbano es más favorable para el balance energético, porque la poca concentración de edificios permite que la energía solar pueda escaparse con más facilidad.

Urbanismo y meteorología

La planificación urbanística y la meteorología son dos disciplinas más cercanas de lo que aparentemente parece. La disposición de las calles, el diseño de los edificios, la concepción del espacio público determinaran probablemente las particularidades microclimáticas de esa ciudad.

El SVF es un factor a tener en cuenta de cara al pronóstico de las temperaturas mínimas en las grandes ciudades.

Así pues, el SVF es un elemento más a la larga lista de factores que condicionan, modifican y determinan los microclimas de las metrópolis, como el metabolismo urbano, el efecto albedo o la presencia de árboles.

Precisamente, el SVF es un elemento que los modelos deben de tener en cuenta para pronosticar las temperaturas mínimas en las grandes ciudades en episodios de temperaturas extremas. El balance energético diurno puede ser tan importante que durante la noche, los edificios son verdaderos obstáculos para que se pueda liberar todo ese calor. Esta semana estaremos muy pendientes de del episodio de temperaturas extremadamente altas, con valores que podrán superar los 40ºC en Andalucía, Extremadura o Castilla-La Mancha.