Estos minúsculos animales están ayudando a reducir el calentamiento global del planeta silenciosamente

Se trata de un animal poco conocido que se vende como alimento para acuarios. Está protegiendo nuestro planeta del calentamiento global a través de una intensa migración.

Zooplancton
Diminutos animales que no son apreciados frente a otros más conocidos como ballenas o pingüinos

El zooplancton come mucho, se hincha y engorda durante la primavera. Después se sumerge cientos de metros en las profundas aguas del océano Antártico donde va quemando su grasa. Los investigadores llevan años realizando el estudio de la migración anual de este diminuto animal en aguas antárticas y sus consecuencias para el cambio climático.

¿Cómo ayudan a frenar el calentamiento global?

El zooplancton, al quemar esa grasa, permite que el océano retenga carbono, que es el principal responsable del calentamiento planetario. De hecho, lo que retienen es el equivalente a las emisiones anuales de unos 55 millones de coches de gasolina.

Una cantidad mucho mayor de lo que inicialmente se esperaba. A medida que la comunidad científica descubre este papel en nuestro planeta, aumentan las amenazas para el zooplancton. El calentamiento de las aguas y la captura comercial de krill podrían amenazar el futuro de este importante animal.

Los autores del estudio creen que los resultados obtenidos son extraordinarios, y obligan a replantearse la cantidad de carbono que almacena el océano Austral. Consideran a estos animales como héroes anónimos por su interesante modo de vida.

El cambio climático, la alteración de las capas oceánicas y las condiciones meteorológicas extremas son amenazas para el zooplancton. Podrían reducir la cantidad de este animal en la Antártida y limitar el carbono almacenado en las profundidades oceánicas.

El zooplancton pasa de forma inadvertida frente a ballenas o pingüinos, a pesar de que su ciclo vital es extraño y fascinante. Por ejemplo, el copépodo, un tipo de zooplancton que es pariente lejano de los cangrejos y las langostas, mide entre 1 y 10 mm y pasa la mayor parte de su vida dormido en el océano entre 500 m y 2 km de profundidad.

Los científicos han comprobado que la atmósfera de nuestro planeta sería mucho más cálida sin ellos. Ya que a escala mundial, los océanos han absorbido el 90 % del exceso de calor generado por el ser humano con la quema de combustibles fósiles. De los cuáles el océano Antártico absorbe cerca del 40 % de exceso de calor, gran parte gracias al zooplancton.

El estudio de su migración

Actualmente, se están invirtiendo millones en todo el mundo para entender cómo el zooplancton almacena exactamente el carbono. Los científicos ya sabían que diariamente contribuía a su almacenamiento a través del hundimiento en las aguas oceánicas de los residuos ricos en carbono de animales.

Sin embargo, hasta ahora no se había cuantificado lo que ocurría cuando los animales migran al océano Austral. Por ello, las últimas investigaciones se centraron en los copépodos y en otros tipos de zooplancton llamados krill y salpas.


Su grasa o carbono es como una batería, que queman lentamente cuando se sientan y pasan el invierno en las profundidades del océano. Esto libera dióxido de carbono. Pero según el funcionamiento de los océanos, si se introduce carbono a gran profundidad, el CO2 tarda décadas o incluso siglos en salir y contribuir al calentamiento atmosférico.

Según la calculadora de emisiones de gases de efecto invernadero de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), la cantidad de carbono transportada al año en el océano por el zooplancton, equivale a las emisiones de 55 millones de coches diésel/año.

Los investigadores calcularon que este proceso, llamado bomba de migración vertical estacional, transporta unos 65 millones de toneladas de carbono al año hasta al menos 500 metros por debajo de la superficie del océano. Siendo la mayor contribución de los copépodos, seguidos del krill y las salpas.

Los científicos afirman que sus hallazgos deberían incorporarse a los modelos climáticos que pronostican cuánto se calentará nuestro planeta. Puesto que sin esta bomba biológica, los niveles atmosféricos de CO2 serían aproximadamente el doble de los actuales. Por tanto, los océanos están haciendo un buen trabajo absorbiendo CO2 y deshaciéndose de él.

Referencia de la noticia

Guang Yang, Angus Atkinson, Evgeny A. Pakhomov, Katrin Schmidt, Weilei Wang, Jennifer J. Freer, Geraint A. Tarling Seasonally migrating zooplankton strongly enhance Southern Ocean carbon sequestration (2025).