Nishinoshima, una isla volcánica que no para de crecer

Nishinoshima es una pequeña isla volcánica que se encuentra en el Pacífico, y desde el año 2013 ha llegado a aumentar hasta 11 veces su tamaño. ¿Por qué? Te lo contamos aquí.

El volcán Nishinoshima sigue en erupción. La imagen corresponde al 1 de marzo del 2015 por el Landsat 8. Fuente: la NASA, Earth Observatory, images by Jesse Allen, using Landsat data from the U.S. Geological Survey.

Nishinoshima es una pequeña isla japonesa que se encuentra en el Pacífico, a 130 kilómetros de la isla habitada más cercana y a unos 1000 kilómetros al sur de Tokio. Los satélites de la NASA la han estado observando, y no es para menos. En ella se encuentra un volcán en erupción expulsando una gran columna de humo y cenizas que poco a poco van alimentando la isla y aumentando su tamaño.

La isla que brota de un volcán

La isla forma parte del arco de las Islas de los Volcanes y se le conoce como 'La isla que no para de crecer'. En noviembre del 2013 comenzó a aumentar y a alimentarse. Actualmente, ha llegado a alcanzar hasta once veces su tamaño original, aunque de vez en cuando muestra retrocesos por la erosión del mar cuando se paralizan las erupciones.

Su origen fue muy curioso. Durante el año 2013 se llegó a crear una nueva masa de tierra al sureste de Nishimoshima, llamada Niijima o Shinto -'Isla nueva' en japonés-, pero al final no tuvo nombre propio porque el material de la primera isla se expandió y se juntaron las dos. Al comparar imágenes del 2013 y ahora es fácil encontrar la diferencia.

En pocos años ha pasado de ser un pequeño islote que albergaba un volcán a convertirse en una isla con centenares de metros de costa. Sin ir más lejos, entre el 19 de junio y 3 de julio, Nishinoshima ha llegado a aumentar hasta 150 metros de costa, según calcula la Autoridad de Información Geoespacial de Japón.

Desde 1974 'la isla no para de crecer'

Hasta el 1974 la isla era tan pequeña e insignificante que podía sobrevolarse sin percatarse de que se encontraba en ese lugar del Pacífico. El volcán estaba inactivo y apagado desde hacía 10.000 años, aunque ese mismo año entró en erupción y la isla empezó a expandirse. A finales del siglo XX, Nishinoshima medía alrededor de 700 metros de largo y 250 de ancho.

En 2020, su superficie ronda los 4 kilómetros cuadrados. Según informes y fotografías aéreas de la Guardia Costera de Japón, la isla comenzó a aumentar aún más este mismo año a finales de mayo. Las imágenes del Satélite Landsat 8 muestran que el volcán estaba arrojando cenizas y lava con más vigor que en otros años anteriores.

El pasado 3 de julio, el penacho volcánico se elevó hasta los 4.700 metros sobre el nivel del mar. Al día siguiente, se detectaron cenizas hasta los 8.300 metros de altitud, el nivel más alto que ha llegado una columna de humo y cenizas desde que el volcán asomó sobre la línea de flotación en el 2013.