Flash de calor, el fenómeno súbito al que te tendrás que acostumbrar

Si vives en el Mediterráneo o en el Cantábrico, cuándo entra un viento de repente recalentado y muy seco, sucede un fenomeno cada vez más recurrente en España. Os presentamos el "flash de calor".

Un día de flash de calor viene acompañado de nubes altas y medias. Barcelona, Alfons Puertas
Un día de flash de calor viene acompañado de nubes altas y medias. Barcelona, Alfons Puertas

Seguimos con esa primavera "loca" y de contrastes muy fuertes. Esta semana hemos vivido un auténtico verano en puntos de Cataluña, Comunidad Valenciana y Región de Murcia, con máximas entre los 30 y los 35 ºC.


Una dorsal de aire cálido en capas medias, junto al viento recalentado de poniente, ha hecho disparar las temperaturas en la fachada oriental peninsular. Esta circunstancia contrasta, y mucho, con las nevadas en puntos del Pirineo que han bajado hasta los 800 metros de altitud.

Estas altas temperaturas "anómalas", más propias de junio que no de mitad de abril, no respondieron a ninguna ola de calor, sino a un flash de calor. Según la AEMET, se trata de un periodo corto de calentamiento anormal, con duración superior a una hora pero menor de un día. Los eventos de flash de calor duran más que los reventones cálidos, pero son demasiado cortos para considerarlos olas de calor.

Así pues, se trata de un fenómeno puntual, temporalmente hablando, y que puede alcanzar desde una comarca hasta regiones amplias. Este período de temperaturas muy altas viene condicionado por la configuración de las masas de aire y también por los fenómenos a escala local, básicamente el régimen de vientos.

Es habitual o bastante frecuente que los días de flash de calor vengan acompañados de contrastes muy bruscos de temperatura en función de la hora o del momento de la jornada, y de disparidad de fenómenos a pocos kilómetros de distancia.

Por ejemplo, el miércoles 12 de abril el poniente hizo récord de temperatura cálida extrema en el Observatori Fabra (Barcelona), con 27,5 ºC. Esa cifra bate récord histórico en este punto desde que se tienen registros, con más de 100 años de recorrido. En algunos puntos de la ciudad condal se alcanzaron los 30 ºC.

Durante esa misma tarde y en menos de una hora, el mercurio se desplomó más de 10 ºC porqué el viento roló de poniente a gregal (noreste), con componente marítimo más fresco.

Entre los reventones cálidos y las olas de calor

El flash de calor tiene la particularidad de encontrarse en un punto medio entre los reventones cálidos -subidas bruscas y locales de temperatura en superficie asociadas a tormentas y fenómenos convectivos- y olas de calor, que son episodios de temperaturas extremas sostenidas en el tiempo.

Este fenómeno puede producirse en cualquier momento del año, pero es más evidente en los equinoccios, por qué hay más dinamismo de las masas de aire y nos encontramos en una pelea perpetua entre la dorsal subtropical y las masas de aire frío del norte. Los picos de calor están asociados a un tiempo muy seco y viento recalentado, que provoca a su vez el fenómeno del Föhn.

Características relevantes

Las principales particularidades de los días con flash de calor son las siguientes:

  • Humedad extremadamente baja debido a vientos resecos y recalentados.
  • Mayor calentamiento cerca de la superficie terrestre, por tanto, en cotas bajas.
  • Cielos despejados o algunas nubes altas y medias.
  • Aire más bien suave o caliente, de origen terral.
  • Brusco ascenso y descenso térmico en poco rato.
  • Ausencia de bochorno, más bien sensación de un calefactor funcionando en el aire libre.
  • Riesgo alto o extremo de incendios forestales.
  • Incremento súbito de la evapotranspiración: vegetación y superficies más resecas.

¿Aumento de los picos de calor?

El incremento de la variabilidad atmosférica y el cambio climático están cambiando los patrones que hasta ahora marcaban la normalidad en nuestro país. La sucesión de fenómenos extremos como lluvias torrenciales o aguaceros, la aparición de heladas fuera de época, la disminución de la tramontana en Girona y la prolongación de episodios de sequía como la que vive Cataluña son algunos ejemplos de este "desbarajuste" constante de las condiciones.

La nueva normalidad climática o los nuevos escenarios atmosféricos se encaminan hacia un incremento de esos "flashes de calor", debido al aumento de oscilaciones de las masas de aire. La prolongación del verano hacia los equinoccios debido a un fortalecimiento y movimiento de la dorsal subtropical podrían implicar más días con esta coyuntura.