Cómo prevenir incendios forestales: 6 recomendaciones para reducir el riesgo

Los incendios forestales no solo destruyen ecosistemas enteros, también amenazan vidas humanas y bienes materiales. Con esta pequeñas acciones cotidianas podemos evitar que una chispa se convierta en una catástrofe.

Los incendios cada vez se producen con más virulencia y es una consecuencia de varios factores pero el incremento de temperaturas es el mayor.

Cada año, miles de hectáreas de bosques arden en todo el mundo y España, al igual que muchos otros países del arco mediterráneo, es especialmente vulnerable durante los meses más cálidos.

El cambio climático, el abandono rural y las prácticas irresponsables han hecho que los incendios forestales sean más frecuentes, intensos y difíciles de controlar. Por ello, la prevención es la medida más eficaz para evitar que el fuego se propague y pase a ser incontrolable.

La prevención es la clave

Además de los factores naturales como las tormentas eléctricas o las altas temperaturas, la mayoría de los incendios forestales tienen un origen humano, ya sea por descuidos, negligencias o incluso intencionalidad.

Es precisamente esta dimensión humana la que convierte la prevención en una herramienta clave. Entender todas las causas desde una colilla mal apagada hasta la quema incontrolada de rastrojos permite diseñar mejores planes de acción, así como sensibilizar a la población sobre su responsabilidad directa en la protección de los entornos naturales.

A continuación planteamos una serie de medidas que son indispensables.

No encender fuego en zonas no autorizadas

Puede parecer una obviedad, pero cada año se siguen produciendo incendios por barbacoas, hogueras o fuegos artificiales en entornos naturales. por lo que nunca hagas fuego fuera de las áreas designadas, especialmente en épocas de alto riesgo (verano, sequías o días de fuerte viento).

En muchas comunidades autónomas está expresamente prohibido entre junio y septiembre.

No tirar colillas ni vidrios

Una colilla mal apagada puede tardar más de 15 minutos en apagarse y es suficiente para iniciar un incendio, así que nunca la tires al suelo, ni desde un coche. Utiliza ceniceros portátiles si estás en el campo.

Lo mismo ocurre con botellas o fragmentos de vidrio: pueden actuar como lupa y encender la vegetación seca.

Mantener el entorno limpio de vegetación seca

Si vives cerca de un bosque o tienes una finca rural, limpiar el perímetro de matorrales, hojas secas y ramas es fundamental. Dejar franjas sin vegetación inflamable actúa como cortafuegos, y evita que las llamas lleguen hasta viviendas o se propaguen sin control.

Cuidado con las herramientas y maquinaria

Las chispas provocadas por motosierras, desbrozadoras, soldaduras o maquinaria agrícola también están detrás de muchos incendios.

Evita usar este tipo de equipos en días con alto riesgo, especialmente en las horas centrales del día y si es necesario usarlos, asegúrate de tener cerca agua o un extintor.

No acampar fuera de zonas habilitadas

Las zonas de acampada controladas cuentan con medidas de seguridad específicas y acampar en cualquier lugar del monte no solo es peligroso, sino que puede contribuir a iniciar un incendio si no se siguen las precauciones adecuadas. Es importante consultar las normativas locales antes de pasar la noche en un entorno natural.

Respeta las alertas y señalizaciones

Durante los meses de verano, los servicios de emergencia emiten alertas por riesgo extremo de incendio y respetar estas señales es clave.

Muchos parques naturales cierran accesos o limitan actividades en estas fechas. No es por capricho, es por seguridad.

La importancia de educar y concienciar

La prevención también pasa por la educación ambiental, y enseñar a los más jóvenes a cuidar el entorno, entender el valor del bosque y cómo actuar en caso de incendio es una inversión a largo plazo.

La educación contra incendios es el pilar base de la prevención.

Las campañas informativas, la señalización clara en senderos y la colaboración ciudadana son herramientas poderosas para proteger nuestros espacios naturales.