Los tornados arrasan Missisipi: cicatrices cálidas

La tormentas severas con fuertes vientos azotaron gran parte del sur y este de Estados Unidos a mediados de abril de 2020, con avisos de tornados que se extendieron desde Florida hasta Virginia

Señal dejada por un tornado en superficie el 14 de abril de 2020

Se confirmaron más de una docena de tornados en Missisipi, incluido uno el 12 de abril de 2020, que modificó el paisaje hasta el punto de que se podía ver desde el espacio.

La cicatriz es visible en una imagen en color natural (arriba), adquirida el 14 de abril de 2020, con el sensor MODIS en el satélite Aqua de la NASA. Muestra dónde el tornado desarraigó la vegetación y esparció escombros a lo largo de un camino de casi 130 km de largo desde el condado de Jefferson Davis hasta el condado de Clarke en la parte sureste del estado.

Los informes preliminares del Servicio Meteorológico Nacional, NWS, indican que el tornado fue un EF4, la segunda intensidad más alta en la escala Fujita mejorada.

La señal de la cicatriz también es evidente en la segunda imagen, que muestra los datos de temperatura de la superficie terrestre también adquiridos por Aqua MODIS. Las áreas dañadas parecen más cálidas que el paisaje circundante porque el suelo desnudo se calienta más rápido que las áreas con vegetación. (Se observó un fenómeno similar en 2018 en el daño asociado con las tormentas de granizo).

Otros tornados también marcaron el paisaje en el área, aunque las cicatrices aparecen más sutiles en las imágenes de satélite. Por ejemplo, un tornado EF3 siguió durante casi 134 km desde Lawrence hasta los condados de Jasper en el sureste de Missisipi. Según informes, la irrupción mortal de tornados dejó a decenas de miles de personas en el estado sin electricidad y destruyó cientos de hogares.

Imágenes de NASA Earth Observatory de Joshua Stevens, utilizando datos MODIS de NASA EOSDIS / LANCE y GIBS / Worldview, y el Nivel 1 y Atmospheres Active Distribution System (LAADS) y Land Atmosphere Capability en tiempo casi real para EOS (LANCE). Historia de Kathryn Hansen.

NASA Earth Observatory

Esta entrada se publicó en Noticias en 16 Abr 2020 por Francisco Martín León