Un diente de reno fosilizado en Atapuerca, Burgos, España, revela fauna de la era glaciar de hace más de 200.000 años

Un diente fosilizado recuperado del yacimiento de la Sierra de Atapuerca (Burgos, España), confirma que un reno habitó esta zona de la península ibérica hace más de 200.000 años atrás y representa uno de los restos de reno más meridionales jamás encontrados en Eurasia.

El fósil de reno de Atapuerca: un tercer molar superior deciduo de un ejemplar juvenil. Crédito: Jan van der Made


Un diente fosilizado recuperado del yacimiento de Galería, en la Sierra de Atapuerca (Burgos, España), confirma que el reno (Rangifer) habitó esta zona de la península ibérica entre 243.000 y 300.000 años atrás.

Representa uno de los restos de reno más meridionales jamás encontrados en Eurasia y constituye el registro más antiguo de fauna glacial en la Península Ibérica, según un estudio publicado hoy en la revista Quaternary.

Reno en la Península en la era glacial

La presencia de especies adaptadas al frío, como el reno, en estas latitudes indica que el clima en aquella época era glacial. El fósil se descubrió en la unidad GIIIa de Galería, en el mismo estrato que un fragmento de cráneo humano y numerosos artefactos líticos, lo que confirma que esta especie coexistió con las primeras poblaciones humanas.

Este descubrimiento, realizado por investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC); el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) y el Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES-CERCA), demuestra que la fauna glaciar se extendió hasta la península ibérica, que, como otras penínsulas del sur de Europa, sirvió de refugio a especies no adaptadas a climas fríos.

«Este fósil ayuda a refinar la datación de los niveles estratigráficos del yacimiento, pero también proporciona evidencia de la intensidad de los periodos glaciares que afectaron a los habitantes de la península durante el Pleistoceno», explica Jan van der Made, investigador del MNCN-CSIC. «La presencia de este reno en tal latitud indica que el frío extremo pudo haber afectado a la fauna ibérica antes y con mayor gravedad de lo que se creía», añade.

Distribución geográfica del reno actual y fósil Rangifer tarandus en Eurasia (A) y la Península Ibérica (B). Crédito: Quaternary (2025). DOI:10.3390/quat8030043

Las glaciaciones más recientes expandieron el ecosistema conocido como la «Estepa del Mamut», que albergaba no solo a estos grandes proboscídeos, sino también a rinocerontes lanudos y renos.

Algunas de estas especies llegaron tan al sur como Madrid e incluso Granada, muy por debajo de la latitud de Atapuerca.

Este trabajo pone de relieve la importancia de estudiar los patrones biogeográficos de la fauna glaciar, permitiendo comprender mejor la capacidad adaptativa de las poblaciones humanas durante el Pleistoceno Medio, hace aproximadamente entre 125.000 y 800.000 años”, concluye Ignacio Aguilar Lazagabaster, investigador del CENIEH.

Referenciahttps://services.meteored.com/extranet/#

Jan van der Made et al, Southernmost Eurasian Record of Reindeer (Rangifer) in MIS 8 at Galería (Atapuerca, Spain): Evidence of Progressive Southern Expansion of Glacial Fauna Across Climatic Cycles, Quaternary (2025). DOI: 10.3390/quat8030043 www.mdpi.com/2571-550X/8/3/43

Esta entrada se publicó en Noticias en 06 Ago 2025 por Francisco Martín León