La segunda quincena de noviembre podría traer lluvias generales

A pesar de este primer temporal invernal, la sequía sigue siendo preocupante en algunas zonas del interior y de la mitad occidental peninsular. Sin embargo, se atisban cambios en la situación meteorológica. ¿Qué es lo que puede pasar? Aquí te lo contamos.

Parece que tendremos que sacar los paraguas en prácticamente toda España: las lluvias podrían generalizarse en unos días.

Durante los últimos días estamos teniendo un tiempo más típico de invierno en buena parte de España, con temperaturas mucho más bajas de los habitual para estas fechas, temporal marítimo, fuertes rachas de viento y precipitaciones intensas en el norte. De hecho, hemos llegado a ver avisos rojos en la Cordillera Cantábrica por nevadas, algo excepcional para la época en la que estamos.

A lo largo de esta primera quincena de noviembre, se han ido sucediendo los descuelgues de aire frío y el paso de sistemas frontales, en los que el viento predominante ha sido de norte o noroeste, por lo que las lluvias y las nevadas han sido muy significativas en la mitad norte de la Península Ibérica y en los principales sistemas montañosos.

Sin embargo, parece que a medio y largo plazo vamos a tener algunos cambios en la situación meteorológica. No hay que olvidar que con estas advecciones del noroeste las precipitaciones son escasas en el Mediterráneo, interior y suroeste peninsular. De hecho, en bastantes zonas de la Meseta y de la mitad occidental la sequía sigue siendo muy preocupante.

¿Qué es lo que podría pasar a partir de este fin de semana? Por ahora, tanto el modelo Europeo como el GFS prevén que a partir del lunes el anticiclón de las Azores se retirará hacia el oeste, por lo que los descuelgues y las borrascas podrían circular más al sur que en estos últimos días, con el viento rolando a oeste e incluso suroeste, más húmedo.

Las lluvias podrían ser generales y abundantes en buena parte del país

Con esta situación, la cota de nieve subiría (los vientos del oeste y del suroeste son más suaves), pero aún así los espesores serían destacables en las zonas altas de las principales cordilleras, pero la mejor noticia es que las precipitaciones tenderían a generalizarse en prácticamente en todo el país, con acumulados de más de 50 l/m2 en la mayoría de las comunidades durante la próxima semana y media.

Además, los modelos no descartan que se formen algunas bajas en el entorno de la Península Ibérica e incluso hay mapas que empiezan a intuir la formación de altas presiones en el entorno de Escandinavia o Islandia, lo que dejaría la puerta abierta a que las bajas presiones pudieran circular rumbo a la península, aunque todavía hay mucha incertidumbre con esto último.

Hasta entonces, nos quedan unas horas más de frío, viento y nieve. Por ahora los acumulados más importantes los hemos encontrado en la fachada cantábrica, pero dentro de unos días las precipitaciones más destacadas podrían trasladarse a otras zonas, como en el entorno de Grazalema, cara sur de los Pirineos y del Sistema Central o en algunos puntos de Galicia. Esperemos que se cumplan estas previsiones, ya que la situación es crítica en algunas de España por la falta de agua.