La borrasca Karine deja nieve, tormentas y rachas huracanadas

Karine ha cruzado la Península durante esta madruguada causando numerosas incidencias. Además de las lluvias generalizadas en el centro y norte, el viento, la nieve y las tormentas han sido noticia. Aquí mostramos algunos de los datos más espectaculares que nos ha dejado.

Ha sido durante la madrugada y las primeras horas de la mañana cuando la borrasca Karine, nombrada por AEMET, ha afectado con mayor intensidad a la Península Ibérica. En este periodo ha experimentado un rápido proceso de ciclogénesis que ha favorecido su intensificación sobre el territorio peninsular. Los primeros efectos han sido inmediatos, al entrar el frente cálido las precipitaciones se han generalizado en toda la mitad norte así como en otros puntos donde la orografía era favorable al flujo de vientos, superándose los 50 litros por metro cuadrado en zonas de la veritente sur de Los Pirineos, el Sistema Central y el sector occidental de Galicia.

Estas precipitaciones han sido en forma de lluvia inicialmente, pero con el paso de las horas y la llegada del frente frío la cota de nieve se ha desplomado dando lugar a fuertes ventiscas en las cordilleras, en algunos casos acompañadas de tormenta.

Sin duda el viento ha sido probablemente el meteoro más destacable, con rachas muy fuertes en amplias zonas e incluso huracanadas en puntos afectados por las tormentas asociadas al frente frío o en zonas con orografía favorable.

Estas rachas, superiores a los 100 km/h, no sólo han afectado a zonas montañosas, también se han sentido en zonas llanas afectando incluso a capitales de provincia como Segovia con 101 km/h o Burgos con 111 km/h y muy cerca del récord absoluto del mes, de 115 km/h registrado el 24 de marzo de 1991. Burgos ha sido de las capitales más afectadas, de hecho la estación de Renuncio, en el lado opuesto del núcleo urbano, ha registrado 130 km/h durante el paso de una de esas tormentas.

Las rachas más espectaculares y peligrosas se han dado, afortundamente, en zonas despobladas de media y alta montaña. Tal es el caso de la estación de esquí de Valdezcaray (La Rioja) con 176 km/h, Camporredondo de Alba (Palencia) con 160 km/h o el registro de la estación meteorológica del Club de Vuelo de Pedro Bernardo (Ávila) que alcanzó un valor máximo de 209 km/h.

Aunque tardaremos en tener un periodo estable, Karine ya se aleja por el Mediterráneo, donde se están dando las rachas más fuertes de viento esta tarde de lunes, acompañadas además de un mal estado de la mar en Baleares. En el resto, las rachas seguirán disminuyendo, todavía con con intervalos fuertes pero dentro de la normalidad.