Erupción en La Palma: ¿la isla podría crecer en las próximas semanas?

La erupción del nuevo volcán de La Palma podría provocar que la isla crezca un poco más, tal y como sucedió hace medio siglo con el Teneguía. Sin embargo, no hay que olvidar que forma parte del proceso de formación de islas volcánicas jóvenes.

La Palma es una isla muy joven, y erupciones como la de estos días provocan pequeños "estirones" en el tamaño de la isla, que sigue en proceso de formación.

En las últimas horas el nuevo volcán de La Palma ha aumentado su actividad explosiva, con la aparición de una nueva boca en el cono principal y fuertes estruendos, a lo que hay que sumar que la expulsión de piroclastos y gases han ido a más. Además, parece que las coladas de lava poco a poco vuelven a avanzar hacia el mar.

Mucho se ha hablado de lo que puede pasar si la lava entra en contacto con las aguas del Atlántico, pero... ¿qué sucedería después? Precisamente, en La Palma encontramos un precedente muy cercano, en concreto con la erupción del Teneguía en 1971. Si la actual erupción se mantuviera unas semanas más, podríamos asistir a un proceso bastante simular a aquel.

Canarias, enormes edificios volcánicos que se elevan desde el fondo del océano

Canarias es un archipiélago volcánico, y las islas son las cimas de enormes edificios volcánicos que se elevan desde el fondo del océano. Por ejemplo, el Teide alcanza los 7.500 metros desde el lecho marino, lo que le convierte en el tercer volcán del planeta, sólo superado por el Mauna Loa y el Mauna Kea, en Hawai.

La erupción del Teneguía provocó que La Palma creciera en su extremo sur, y podría pasar algo parecido en el proceso eruptivo actual.

En La Palma sucede algo muy parecido, y además es una de las islas más jóvenes del archipiélago, por lo que sigue en proceso de formación. No hay que olvidar que La Palma y el resto de islas de origen volcánico se han formado a base de erupciones que hicieron crecer su tamaño hasta llegar a lo que podemos ver hoy en día.

El precedente del Teneguía

En la "Isla Bonita" se encuentra el suelo más joven de España, que se formó tras la erupción del Teneguía. Las coladas de lava llegaron al mar e hicieron crecer la extensión de la isla en unos dos millones de m², provocando importantes daños a los cultivos de vid y formando una nueva playa. En aquella ocasión la erupción se produjo en una zona deshabitada, aunque murieron dos personas intoxicadas al acercarse demasiado al volcán.

La erupción actual, un pequeño estirón de una isla en constante cambio

En esta ocasión, si las coladas de lava consiguen llegar al mar, es bastante probable que al solidificarse la isla vuelva a pegar un pequeño estirón, tal y como sucedió hace medio siglo. Un pequeño paso en su crecimiento, que es imperceptible para nuestros ojos, pero es un proceso continuo.

Estamos contemplando una metamorfosis de un paisaje que está cambiando constantemente. A La Palma y a El Hierro les quedan miles de erupciones que harán que aumenten de tamaño y altura, aunque la gran mayoría no las veremos, ya que es un proceso que se extiende durante miles o millones de años. Es posible que aparezca un volcán todavía más grande que el Teide.

La mejor noticia de estos días es que por ahora no se han producido daños personales, aunque desgraciadamente muchas personas han perdido sus viviendas o/y sus campos. Pero no hay que olvidar que La Palma es prácticamente un gran volcán, y que la Cumbre Vieja tiene apenas 100.000 años, lo que es un suspiro en la escala geológica. Sin duda, estamos ante una gran oportunidad para comprender mejor el riesgo volcánico y el proceso de formación del archipiélago canario.