Las medusas ganan terreno en un Mediterráneo cada vez más caliente

Este verano está siendo noticia la gran cantidad de medusas que están apareciendo en algunas zonas costeras de España, y todo apunta a que en los próximos años irán a más. El cambio climático es una de las principales causas

Rhizosthoma lutheum, también conocida como medusa gigante, flotando en aguas del Mediterráneo.

Durante la última semana se han avistado en las costas del Mediterráneo, principalmente en las playas andaluzas y murcianas, medusas de más de dos metros de ancho con tentáculos de medio metro y de hasta 40 kilos de peso. Los expertos confirman que su nombre científico es Rhizostoma Luteum, una especie de medusa gigante de color blanco traslúcido con tonalidades violetas y cuyas picaduras no son peligrosas, aunque sí que pueden llegar a causar irritaciones.

Estas medusas enormes fueron descritas en 1827 y vistas por primera vez en las costas españolas en 2012. A pesar de no ser el primer avistamiento reportado, cada año visitan las costas españolas con mas frecuencia, y en los últimos tres años se han detectado varias decenas de ejemplares de más de 7 kilos.

¿Por qué cada vez hay más medusas?

A principios de primavera, el investigador en ciencias marinas del CSIC, Josep María Gili Sadrá, auguraba un incremento en el número de medusas respecto a veranos anteriores, y efectivamente no se equivocada. Este experto señalaba el aumento de las temperaturas del mar como el principal responsable de la ocurrencia de este fenómeno.

El incremento de la temperatura marina y la disminución de las precipitaciones a consecuencia del cambio climático son factores que contribuyen a calentar el mar Mediterráneo. Un mar cálido favorece que las medusas se sientan más cómodas incrementando su ciclo de vida, y también propicia un crecimiento del fitoplancton, su principal alimento.

Aunque estas medusas estén desfallecidas en la orilla no se deben tocar, ya que aún continúan con veneno en sus tentáculos.

Otro factor influyente en el auge de las medusas es la sobreexplotación pesquera; la disminución de sus principales depredadores como son el atún, los cangrejos, los peces lunas o las tortugas a manos de los humanos les permite reproducirse sin control. Tampoco hay que olvidar el problema de la contaminación.

¿Qué nos deparará el futuro?

Los especialistas confirman que durante los próximos años, si el calentamiento global sigue evolucionando como hasta ahora, las temperaturas del mar Mediterráneo aumentarán más de 2 ºC en las próximas décadas. Esto provocará que las medusas nos visiten con una mayor frecuencia, al haber una mayor cantidad de medusas si no se revierte el calentamiento del Mediterráneo y la sobreexplotación pesquera.

El cambio climático, la sobreexplotación pesquera y la contaminación favorecen la proliferación de medusas, cuyo número podría aumentar de forma importante en las próximas décadas.

A menos que nos decidamos a hacer algo para frenar la crisis climática y la contaminación de las aguas, la aparición de las medusas generarán cada año más problemas a los bañistas del Mediterráneo. Es por ello que los científicos centran todos sus esfuerzos no sólo en evitar el aumento de las temperaturas, si no también en construir herramientas sólidas que mejoren la predicción de sus plagas en las costas.