El agua embalsada sigue cayendo a las puertas de la canícula

A pesar de las tormentas de las últimas semanas, la reserva hídrica de España sigue descendiendo, acentuándose la bajada, y en estos momentos se encuentra al 57%. ¿Cómo ha influido la situación meteorológica de junio?

Mayor pantano de España, la Serena, provincia de Badajoz
El embalse de la Serena (el mayor de España) situado en la cuenca del Guadiana, se encuentra en estos momentos a tan solo el 16% de su capacidad.

La mayor parte de las precipitaciones caídas en junio han sido de carácter convectivo, y se han concentrado durante la primera mitad del mes y con la DANA que afectó a la mayoría de las regiones entre los días 16 y 22. En este episodio los valores máximos acumulados rondaron los 150 l/m2 en zonas de Galicia y de la cornisa cantábrica. Con todas estas cantidades, podemos considerar a junio un mes relativamente húmedo en el conjunto de la Península Ibérica.

Las temperaturas, en líneas generales, están siendo superiores a las normales en la mayor parte del territorio, sobre todo en los valores diurnos. Aunque en los días de la DANA se registraron rachas huracanadas de viento de carácter muy local (reventones), podemos considerar que en junio el viento no ha sido tan fuerte como en otras ocasiones. El otro factor a tener en cuenta es la humedad relativa, que durante este mes se la puede considerar normal.

Por tanto, de las principales condiciones meteorológicas para la evaporación, solo las temperaturas están siendo adversas para nuestros embalses, cuyas reservas de agua han disminuido más que la media de los últimos 10 años en la primera mitad del mes.

La cuenca del Segura, donde más aumenta el agua embalsada

Los embalses que más se deberían haber beneficiado de las tormentas tenían que ser los de las cuencas del Segura y los del Cantábrico Occidental. Aunque los suelos se encuentran ya con poca humedad, las precipitaciones han sido suficientes para que los embalses se beneficien del aporte pluvial.

Presa del embalse del Cenajo, Murcia
Presa del embalse de El Cenajo, en la cuenca del Segura, la que más aumentado en el mes de junio.

De todos los pantanos de esas dos cuencas, el que más ha aumentado es el de El Cenajo, con una subida del 13%, y que está situado a pocos kilómetros de zonas en las que han rondado los 100 l/m2, destacando la sierra de Moratalla, en la Región de Murcia, cuyo pluviómetro midió algo más del 150% sobre su valor normal en el mes. Por todos estos factores, la cuenca que más ha aumentado ha sido la del Segura, con una subida del 3,3%.

Las reservas hídricas se desploman en el Tajo

Como sabemos, el problema de los grandes almacenamientos de agua es la pérdida por evaporación. Los factores que más influyen en ella son la temperatura, el viento y la radiación solar. Nos encontramos que en junio los factores más negativos son nuevamente las altas temperaturas, y sobre todo la radiación solar, ya que nos encontramos en el momento en el que hay más horas de sol.

Teniendo en cuenta el irregular aporte hídrico durante este mes, en especial en comarcas del suroeste y del nordeste peninsular, sumado a todos los demás factores, hace que la cuenca más perjudicada en las últimas semana sea, otra vez, la del Tajo, con una disminución ligeramente superior al 11%, representando una cantidad del 55% sobre su capacidad total, alejada casi un 10% de su media de los últimos 10 años.

Conclusiones

Acabamos de empezar el verano, la estación más seca del año en casi todo el país, aunque podemos considerar que junio está siendo relativamente húmedo desde el punto de vista general, y, aún así este mes hemos perdido algo más del 3% en el agua embalsada, que en estos momentos está al 56,99%, un 6,5% inferior a la misma fecha del año pasado. En estos momentos nos encontramos por debajo de la media de los diez últimos años, en torno a un 12%.

La cuenca del Guadiana es la que está en la peor situación, con sus reservas superando ligeramente el 32%, aunque la del Guadalquivir es la que presenta la mayor anomalía negativa respecto a la media de los últimos 10 años

En una situación atmosférica normal, ya iniciado el verano, es muy posible que no vuelva a llover de forma apreciable y general en la mayoría de las regiones hasta septiembre, por lo que debemos seguir vigilando mucho la situación de nuestros embalses, principalmente en el sur peninsular, ya que la cuenca del Guadiana es la peor de todas con tan solo un 37,02% de su capacidad. Aunque la más alejada de su media de 10 años es la del Guadalquivir, que ya es inferior en un 31%.