Sequía meteorológica: ¿cómo está la situación?

En un verano de contrastes, la escasez de agua vuelve a ser noticia en muchos puntos de nuestro país. ¿Cómo está la situación? ¿Cuánto ha llovido? ¿Cómo serán los próximos meses? Te lo contamos.

sequí meteorológica
El déficit de lluvias en el último año nos sitúa en sequía meteorológica.

En verano la sombra de la sequía planea sobre nuestras cabezas. La escasez de precipitaciones en esta época del año es normal, el problema radica en los meses que llevamos a nuestras espaldas. Desde el inicio del año hidrometeorológico, es decir, desde el 1 de septiembre de 2018, la precipitación acumulada se encuentra tan solo en valores normales o ligeramente superiores en áreas muy reducidas de la vertiente mediterránea. En algunas zonas del oeste de nuestro país ha llovido desde entonces menos de la mitad.

Viviendo de las rentas

Este 2019 estamos viviendo de las rentas. ¿Por qué? Porque 2018 fue un año muy húmedo en el conjunto de España, llovió un 25% más de lo habitual. La primavera destacó por encima del resto de estaciones, con un carácter extremadamente húmedo. De hecho, 2018 resultó ser el segundo año más lluvioso de este siglo (solo por detrás de 2010) y el quinto más húmedo desde 1965.

Sin embargo, 2017 fue un año en el que las reservas hídricas volvieron a descender debido a la escasez de precipitaciones en las estaciones más lluviosas: el otoño y la primavera. Quedó clasificado como el segundo año más seco desde 1965. No hemos andado, por tanto, muy boyantes en los últimos años y a esto hay que sumarle que en lo que llevamos de año, solo abril nos ha dejado valores de precipitación dignos, casi un 50% más de precipitación.

¿Cómo están los embalses?

Según los últimos datos del Ministerio para la Transición Ecológica, la reserva hidráulica española se encuentra esta semana al 49,4% de su capacidad. Esto supone casi un 21% menos respecto a la media de agua embalsada de los últimos diez años.

Las cuencas que gozan de mejor salud son las de la vertiente cantábrica, las cuencas gallegas, internas del País Vasco, el Ebro, internas de Cataluña y en el sur peninsular Tinto, Odiel y Piedras. A la cola están las cuencas del Júcar y del Segura con un 33,8% y un escaso 25,1% respectivamente.El embalse de la Serena, en la provincia de Badajoz, el más grande de Europa, se encuentra tan solo al 30% de su capacidad.

Dada esta situación, algunos embalses españoles ya han entrado en situación de alerta, lo que supone que el agua para el consumo humano está garantizada para dos años como máximo si el agua embalsada no aumenta. El campo también está padeciendo la escasez de agua siendo las comunidades de Castilla y León, Castilla-La Mancha o Aragón las más afectadas.

¿Cuáles son las previsiones?

A priori, las previsiones estacionales no son muy halagüeñas. Según AEMET, en la mitad norte peninsular existe un 50% de probabilidad de que el trimestre agosto-septiembre-octubre sea más seco de lo habitual, un 30% de que sea normal y un 20% de probabilidad de que sea húmedo. En cambio, en la mitad sur, donde más falta hace el agua, no existe anomalía. Esto significa que las lluvias serían las normales para la época, siendo septiembre y octubre los meses que mayor cantidad de agua recogerían. Además, este trimestre con precipitaciones normales o por debajo de la media irían acompañadas de un periodo de temperaturas más cálido en todo el país, salvo en el archipiélago canario.

Si nos fijamos en el modelo americano, el de la NOAA, la tendencia es parecida. No existirían anomalías muy marcadas para el conjunto de nuestro país, especialmente en el centro y sur peninsular. Tan solo en la cornisa cantábrica las lluvias podrían ser ligeramente superiores a las normales. Sea como sea, solo nos queda esperar a que arranque el otoño meteorológico y, mientras tanto, hacer un uso responsable de los recursos hídricos.