¿Podrá acercarse algún huracán a España durante la próxima temporada? Este es el pronóstico de Meteored

La temporada de huracanes 2024 en el Atlántico se prevé muy activa. Esto hace aumentar la probabilidad de recibir la visita de algún sistema tropical.

Nos vamos acercando al inicio oficial de la nueva temporada de huracanes en el Atlántico, que comenzará el próximo 1 de junio y finalizará el 30 de noviembre. Comienzan a conocerse las primeras predicciones sobre el comportamiento esperado, elaboradas en base a algunos indicadores como el ENSO y la temperatura del agua del mar(SST), y todo apunta a que la temporada de huracanes 2024 será muy activa.

Hace unos días, nuestros compañeros de Meteored México lanzaron un primer pronóstico de pretemporada. Según los especialistas, se podrían llegar a formar en la cuenca 25 sistemas ciclónicos tropicales con nombre, englobando hasta catorce huracanes de categoría 1 y 2, y seis majors con categoría 3 o superior.

Huracán
Las predicciones apuntan a que la temporada de huracanes 2024 será muy activa.

Esta previsión supera por poco a la publicada recientemente por la Universidad Estatal de Colorado, que prevé 23. Cualquiera de estas predicciones podría marcar un récord histórico y romper las estadísticas.

Tomando como período de referencia el 1991-2020, el número medio de sistemas con nombre por temporada es de 14, con 7 huracanes y 3 de ellos majors. Es muy llamativo que los números que se barajan para este año sean significativamente mayores que los de la climatología, con el factor añadido de que con todos los datos e indicadores que se dispone ahora, a principios de abril, el nivel de confianza de la predicción es alto.

Transición de El Niño a La Niña

Una de las circunstancias que más condiciona el que haya una mayor o menor actividad ciclónica durante la temporada de huracanes es la fase del ENSO (El Niño Oscilación del Sur). En junio del año pasado se inició un evento de El Niño, que alcanzó gran intensidad durante el pasado otoño e invierno y que empieza a mostrar signos de debilidad. Los años con El Niño habitualmente se corresponden con temporadas de baja actividad, algo que se invierte cuando tenemos un evento de la Niña.

Cambio de El Niño a La Niña
Probabilidades del ENSO para el índice de SST en el área oceánica El Niño 3.4

Según la NOAA, de aquí a que comience la temporada, el actual evento de El Niño irá evolucionando hacia una fase neutral, para iniciarse en el trimestre mayo-junio-julio un evento de La Niña, que irá intensificándose según transcurra el segundo semestre de 2024. Esta fase del ENSO no solo conlleva un enfriamiento de las aguas del Pacífico tropical, sino también cambios en algunos patrones meteorológicos.

La previsible la reducción de la intensidad de los vientos en altura (un inhibidor natural de la convección) sobre el Atlántico Norte, favorece el desarrollo de tormentas tropicales y huracanes. Es uno de los factores, pero no el único, que puede potenciar la actividad ciclónica. Hay que poner también el foco de atención en la temperatura de las aguas por donde irán discurriendo las ondas tropicales.

Aguas cálidas en el Atlántico Norte

Es muy llamativo el salto hacia arriba que dio la SST la pasada primavera (antes de iniciarse el evento de El Niño) tanto a nivel global (las cuencas oceánicas en su conjunto), como en el Atlántico Norte. La anomalía cálida se ha mantenido en el tiempo durante los últimos dieciséis meses. Se están investigando las causas que han podido provocar este hecho y ya hay científicos del clima que no descartan que se trate de un posible punto de no retorno en el comportamiento del sistema climático.

SST Atlántico Norte
Curvas con la evolución de la temperatura del agua superficial del mar en el Atlántico Norte (entre las latitudes y longitudes indicadas arriba) desde 1981 hasta la actualidad. En color naranja se aprecia la gran anomalía cálida iniciada el año pasado, que todavía continúa. Fuente: ©NOAA.

En vista a todo lo que hemos ido comentando, las probabilidades de que alguna tormenta tropical o huracán discurra por las cercanías Canarias, Madeira, la Península Ibérica o el sur de las Islas Británicas es mayor que otros años. Nuestra capacidad predictiva actual no permite saber si dicha circunstancia llegará a producirse, pero hay más papeletas para que ocurra que en temporadas pasadas.

Las trayectorias retrógradas (en sentido América-Europa) de los sistemas tropicales en el Atlántico siguen siendo la excepción a la regla, pero bajo las condiciones de contorno actuales y las previstas, aumenta la probabilidad de que una vez que se forme uno de esos sistemas en el seno de una onda tropical, evolucione por aguas subtropicales de la parte oriental de la cuenca.