Negacionismo en el Horizonte: ¿manipulación del clima o de los datos?

Estos días se han hecho virales unas polémicas gráficas mostradas en un programa de televisión sobre la evolución del clima en España en las últimas décadas para negar el proceso actual de cambio climático. Aquí te mostramos la realidad.

cambio climatico España
Los datos que muestran los cambios en nuestro clima son contundentes, aunque todavía hay quien se empeña en negar la realidad.

El cambio climático es un tema que está en boca de muchas personas en los últimos tiempos por diversas razones: se está celebrando la COP27 en Egipto estos días, la sequía está causando estragos en buena parte de Europa, protestas activistas muy polémicas en diversos museos de Europa... Y también ha sido uno de los temas principales tratados en la televisión, en muchas ocasiones de forma inadecuada.

Una gráfica extraña y la eterna confusión entre tiempo y clima

En las últimas horas, han circulando por las redes sociales las gráficas mostradas en un conocido programa de televisión en las que se mostraba la temperatura media anual registrada en los últimos 50 años en la España peninsular.

En el gráfico de barras, en el que por cierto no se ha ajustado la escala de forma adecuada, se muestra que la temperatura media fue de 14,2 ºC en 1961 y 2021 (aunque no sabemos de dónde han sacado esos datos, ya que los oficiales, proporcionados por AEMET, no coinciden). Si en el eje Y se comienza por 0 ºC, lo interesante en este caso hubiera sido trazar una línea de tendencia o colorear las barras en función de la anomalía respecto a la media.

Es importante quedarse con la tendencia observada en las últimas décadas en España, y no solo con algunos datos puntuales.

Para algunas personas, es una prueba irrefutable de que en España no está cambiando el clima. Además de no coincidir los datos (volvemos a insistir que en la gráfica mostrada en la televisión la escala no está ajustada correctamente y no se sabe muy bien de dónde se han obtenido los registros), es un gran error comparar dos cifras puntuales en una serie de medio siglo: la eterna confusión entre tiempo y clima.

La tendencia es muy clara: las temperaturas han subido más de 1,5 ºC en España en los últimos 50 años

Porque si se recorta la misma gráfica mostrada en el programa por la parte superior, se aprecia una importante tendencia al alza de las temperaturas en las últimas décadas: eso es el clima, eso es el cambio climático. Y aunque a muchos les pueda parecer poca cosa un aumento de más de 1,5 ºC en 50 años, a escala climatológica es un cambio muy brusco y rápido, y que tiene una serie de consecuencias importantes.

Y este aumento de temperatura, general pero desigual, se está registrando tanto en estaciones que han quedado en plena trama urbana como en aquellas situadas en alta montaña. De hecho, en estas últimas la tendencia al alza es todavía más acusada, y están más que contrastados hechos como la disminución de los días con nieve o los cambios que se están produciendo en los pisos bioclimáticos.

La realidad frente a un plan urdido para confundir a la audiencia

"Si pensamos en temperaturas medias anuales y miramos el horizonte temporal hacia atrás, encontramos valores significativamente inferiores en las décadas precedentes que en la actual" señala José Miguel Viñas, meteorólogo de Meteored.

"En España dicha temperatura ha aumentado del orden de +1,5 ºC con respecto a los de la segunda mitad del siglo XIX. Esa tendencia al alza se observa, con mayor o menor magnitud, en cualquier otro lugar de la Tierra y se llama calentamiento global. Es un hecho indiscutible basado en las observaciones meteorológicas. Si miramos el horizonte temporal hacia el futuro, las proyecciones climáticas son claras: las temperaturas seguirán subiendo" prosigue Viñas.

"Tan solo hay un 'Horizonte' donde por prestidigitación televisiva desaparece el calentamiento global en España a golpe de vista. No son cosas del directo, sino un plan urdido para confundir a la audiencia y hacerla dudar de la realidad climática, que más allá de lo que indican los datos estamos todos percibiendo, incluido los que montan ese circo televisivo", advierte.

Los cambios que estamos percibiendo en España

Aunque muchas personas niegan el calentamiento global provocado por la emisión de gases de efecto invernadero, los datos de España son demoledores: en el presente siglo es mucho más habitual que se batan récords de calor que de frío, incluso en series centenarias. Asimismo, aconsejamos la lectura del Informe sobre el estado del clima de España en 2021 publicado por AEMET.

Efectivamente, cambios climáticos han existido y existirán en nuestro planeta. El principal problema del actual es que la acción del ser humano ha provocado que sea mucho más brusco y rápido de lo normal: los ecosistemas no tienen tiempo de adaptarse a este cambio tan acelerado que está sufriendo nuestro planeta.

lluvias torrenciales
Otro de los cambios más perceptibles es que está cambiando la forma de llover en nuestro país: las precipitaciones son más irregulares e intensas.

También es un hecho contrastado que la forma de llover está cambiando en España, con precipitaciones más irregulares en buena parte del país, debido a las alteraciones que se están produciendo en la circulación atmosférica en latitudes medias: el chorro polar tiende a discurrir con mayores meandros, y los fenómenos subtropicales se están volviendo más habituales en nuestras latitudes.

También es un hecho contrastado que la forma de llover está cambiando en España, con precipitaciones más irregulares en buena parte del país, debido a las alteraciones que se están produciendo en la circulación atmosférica en latitudes medias: el chorro polar tiende a discurrir con mayores meandros, y los fenómenos subtropicales se están volviendo más habituales en nuestras latitudes.

No solo hablamos de números: nuestro día a día también se ve afectado

Aunque haya quien se lo tome a broma o que vea positivo que haga algo más de calor, es importante recordar algunas cuestiones. Por ejemplo, la agricultura está sufriendo muchísimo ante este aumento de los extremos atmosféricos en nuestro país.

El Mediterráneo se está tropicalizando y las especies autóctonas no pueden adaptarse a un cambio tan rápido. También tiene consecuencias en el tiempo y clima.

En el mar Mediterráneo, que también ha sufrido un importante incremento en su temperatura superficial en las últimas décadas, los cambios están siendo tan rápidos que las especies autóctonas no se pueden adaptar, sufriendo grandes eventos de mortandad, viéndose desplazadas por las invasoras o exóticas. Y también tiene consecuencias nivel meteorológico y climático (noches tórridas más frecuentes, una extensión en el calendario de lluvias torrenciales...).

Y por supuesto, también afecta a la salud, y no hay más que recordar el exceso de mortalidad de este verano en España debido a una situación extraordinaria de intenso calor. Eso sin olvidar el problema de contaminación que sufren nuestras grandes ciudades, algo que suelen pasar por alto los medios de comunicación.

El turismo, el motor económico de España, también se ha visto muy golpeado por el cambio climático. Algunas estaciones de esquí tendrán que cerrar porque ya no sale rentable debido a la escasez de nieve en ciertas cotas. En verano, los turistas preferirán elegir destinos en los que el confort climático sea mayor.

Explicar de forma adecuada el cambio climático, sin caer en extremismos

En definitiva, es lamentable que se frivolice con este problema que nos afecta a todos, con el que tendremos que convivir y adaptarnos en las próximas décadas. Se trata de algo que nos afecta a todos en nuestro día a día, y negarlo u obviarlo solo conseguirá que repitamos los errores que hemos cometido en los últimos años.

Hay que aceptar la realidad y aprender a convivir y adaptarnos a la nueva realidad climática.

Desgraciadamente, los datos son los que son, y hay que aceptar la realidad. No hay que caer en el catastrofismo climático que venden algunos medios de comunicación, pero tampoco en el negacionismo. La correcta divulgación del cambio climático es más necesaria que nunca.