Braer: la súper borrasca más profunda y olvidada del Atlántico Norte
Mientras que las borrascas explosivas y dañinas como Xynthia, Lothar y Klaus están en nuestras mentes por sus mortíferas consecuencias, existe una que ha pasado desapercibida para el gran público: Braer. Fue la borrasca más intensa jamás observada en el Atlántico Norte.
El ciclón extratropical Braer, de enero de 1993, fue la borrasca más profunda jamás registrada fuera de los trópicos con una presión central mínima de 914 hPa, pero debido a que su trayectoria marítima entre Escocia e Islandia causó pocos daños, nunca su intensidad fue examinada en detalle.
La revista inglesa Weather le ha dedicado un artículo especial en su número de marzo de 2013 y presenta un estudio de la dinámica y evolución de la borrasca usando datos del re-análisis del modelo del CEPMP.
En el periodo de 24h, comprendido entre el 9 y 10 de enero de 1993, la borrasca sufrió un proceso de ciclogénesis explosiva profundizándose 78 hPa en 24h en el Atlántico Norte y llegó a poseer un mínimo de presión de 914 hPa.
La borrasca Braer cerca de su pico de intensidad sobre el 10 de enero de 1993. (a) Imagen infrarroja del satélite AVHRR a su paso por el oeste de UK (cortesía de www.satdundee.ac.uk ) a las 0920 UTC. (b) Análisis de superficie a las 1800 UTC (tomado de Burt (1993)).
(a) Trayectoria (línea azul) junto con la trayectoria media de los ciclones que se profundizan explosivamente en el Atlántico Norte (línea continua gruesa y negra los del Atlántico noroeste y línea discontinua negra los del atlántico noreste) según Wang and Rogers (2001). Los triángulos muestran el centro de Braer en los tiempos señalados así como los valores del mínimo de presión.
(b) Evolución del centro del mínimo de presión en mbar. Las 12 horas de la profundización más rápida se indica en rojo en ambas figuras. Los datos son de enero de 1993. Fuente: Weather.
En las conclusiones del estudio, la borrasca Braer se formó en la región derecha de entrada de un excepcional e intenso corriente en chorro de niveles altos en la costa este de los EEUU y cerca del borde norte la Corriente del Golfo.
La interacción de dos anomalías de vorticidad potencial, VP, de niveles altos con otra anomalía de VP de niveles bajos generadas por efectos diabáticos contribuyeron al rápido desarrollo e intensificación de la borrasca en niveles bajos, creando una “torre” de VP durante su fase madura. Muchos de estos atributos son similares a anteriores ciclogénesis explosiva sobre el Atlántico Norte. Las simulaciones con el modelo WRF muestran que los procesos diabáticos contribuyeron a más del 30 hPa en las caídas de presión de Braer y causaron un ligero desplazamiento hacia el sur. En las simulaciones, la eliminación de Groenlandia no supuso ningún cambio en la intensidad de la borrasca pero si generó un desplazamiento más cercano a las Islas Británicas.
Otras figuras
Fuente y referencia:
Weather. Volume 68, Issue 4, pages 105-111, 27 MAR 2013 DOI: 10.1002/wea.2097