El calentamiento global sincroniza los bosques ibéricos y siberianos

El crecimiento de los anillos de seis especies de coníferas durante los últimos 120 años indica que el aumento global de las temperaturas está provocando una sincronización del crecimiento en ecosistemas muy alejados entre sí.

Figura 1.- Bosque de coníferas junto al río Vasyugan, en Siberia
Figura 1.- Bosque de coníferas junto al río Vasyugan, en Siberia. Fotografía de Vadim Andrianov

El aumento global de las temperaturas podría estar alterando el patrón de crecimiento de los árboles en distintos lugares del planeta y provocando una sincronización en algunos bosques tan alejados como la taiga siberiana y el bosque mediterráneo. El equipo de Jordi Voltas, de la Universidad de Lleida, publica esta semana en la revista PNAS los resultados de un estudio en el que han analizado los anillos de crecimiento de seis especies de coníferas durante los últimos 120 años.

Las muestras han sido tomadas de la región central de Siberia y de bosques españoles y su análisis indica que en el siglo XXI se produjo un aumento de la sincronización de los ritmos de crecimiento. Según los autores, el cambio climático en estas regiones parece estar detrás de este fenómeno a pesar de que ambos ecosistemas están separados por miles de kilómetros y tienen características diferentes. En los bosques boreales el aumento de temperatura está adelantando la formación de madera y provocando un mayor impacto de las fluctuaciones anuales, mientras que en el bosque mediterráneo la principal causa del cambio son los periodos de sequía.

Figura 2.- Pinar de Valsaín (Segovia).
Figura 2.- Pinar de Valsaín (Segovia). Fotografía de Carlos de Miguel

Los científicos aseguran que esta coherencia en el crecimiento de los anillos en una escala geográfica tan grande no tiene precedentes y sospechan que es una muestra del impacto del calentamiento en escalas subcontinentales. El proceso, relacionado con el ciclo del carbono, se produce en última instancia como consecuencia de las primaveras más cálidas en las latitudes más altas y a los inviernos más calurosos en las latitudes medias y podría ser la antesala de una ralentización del crecimiento de los árboles en todo el planeta.

Fuente: Vozpópuli

Esta entrada se publicó en Noticias en 04 Ene 2017 por Francisco Martín León