Europa lucha contra la contaminación atmosférica

La UE aprueba nuevas normas para que los Estados miembros reduzcan drásticamente la contaminación atmosférica

Objetivos para 2030 de la UE en la lucha contra la contaminación
Objetivos para 2030 de la UE en la lucha contra la contaminación

El Parlamento Europeo y el Consejo han promulgado la nueva Directiva sobre límites máximos nacionales de emisiones (NEC, National Emissions Ceilings), basada en una propuesta de la Comisión que establece límites más estrictos a los cinco principales contaminantes en Europa. Entrará en vigor el 31 de diciembre de 2016.

Cuando se aplique plenamente, la Directiva reducirá en casi un 50% los efectos negativos sobre la salud de la contaminación atmosférica, como las enfermedades respiratorias y la muerte prematura, para el año 2030. Incluso si los contaminantes atmosféricos son asesinos invisibles, las personas están cada vez más preocupadas por la calidad del aire que respiran y el acuerdo de límites más estrictos en el NEC es por lo tanto un logro importante. También tendrá beneficios sustanciales para la calidad del agua dulce, el suelo y los ecosistemas y ayudará a abordar los impactos de las partículas nocivas que causan el cambio climático como el carbono negro. La Directiva es el elemento central del Programa de Aire Limpio más completo de la Comisión para Europa (Clean Air Programme for Europe).

Karmenu Vella, Comisaria de Medio Ambiente, Pesca y Asuntos Marítimos, ha declarado: "Las nuevas normas europeas sobre la calidad del aire son un hito importante en la lucha contra este asesino invisible que es la contaminación atmosférica. La polución mata a más de 450.000 personas en Europa cada año. Esto es diez veces más que los accidentes de tráfico. Ahora es el momento para que los gobiernos nacionales empiecen con la implementación para que las personas puedan beneficiarse de un aire más limpio. Trabajaremos con los Estados Miembros para apoyarlos en este desafío para mejorar la salud de las personas y ciudadanos de la UE”.

Poner en práctica las nuevas reglas

El papel de los Estados miembros en la coordinación y aplicación de la Directiva a nivel nacional es muy importante. Los Estados miembros deben transponer la Directiva a la legislación nacional a más tardar el 30 de junio de 2018 y elaborar un programa nacional de control de la contaminación atmosférica para 2019 que establezca medidas para garantizar que las emisiones de los cinco principales contaminantes atmosféricos para que se reduzcan en los porcentajes acordados para 2020 y 2030. Coordinar con planes en campos como el transporte, la agricultura, la energía y el clima. Esto requerirá inversión, pero los costos serán muchas veces superados por los beneficios en ahorros de costos, particularmente en salud y enfermedad en el trabajo. La reciente propuesta de la Comisión de un reglamento de gobernanza de la Unión de la energía destaca la importancia de las sinergias entre la calidad del aire y las políticas climáticas y energéticas y la nueva Directiva NEC.

La Comisión colaborará con los Estados miembros para garantizar una buena aplicación, por ejemplo mediante la creación de un nuevo Foro sobre el Aire Limpio para el otoño de 2017. Ello reunirá a las partes interesadas para intercambiar experiencias y buenas prácticas. La Comisión también facilitará el acceso a los instrumentos de financiación de la UE.

Por último, la Directiva preparará el camino para la ratificación del Protocolo revisado de Gotemburgo (revised Gothenburg Protocol) acordado internacionalmente por los Estados miembros en 2012 en el marco de la Comisión Económica para Europa de las Naciones Unidas. Esto reducirá la contaminación en los Estados de Europa oriental, el Cáucaso y el Asia central, beneficiando tanto a los propios países como a los ciudadanos de la UE que están más directamente expuestos a la contaminación transfronteriza.

Antecedentes

En diciembre de 2013, la Comisión publicó el Programa de Aire Limpio para Europa, que actualizó los objetivos de la política aérea para 2020 y 2030. Incluía una propuesta sobre las instalaciones de combustión de tamaño medio (Directiva 2015/2193); la propuesta de una nueva Directiva NEC; y una propuesta de ratificación del recientemente modificado Protocolo de Gotemburgo.

La Directiva NEC establece límites máximos de emisión para cada país por año para los cinco principales contaminantes: partículas finas (PM2, 5), dióxido de azufre, óxidos de nitrógeno, compuestos orgánicos volátiles no metálicos y amoníaco.

Los compromisos de reducción de 2020 son idénticos a los que los Estados miembros ya han acordado internacionalmente en la revisión de 2012 del Protocolo de Gotemburgo. Los compromisos de 2030 requieren reducciones sustancialmente más profundas. Esto ayudará a reducir la contaminación transfronteriza y las concentraciones de fondo en toda Europa.

Tanto los sectores como algunas de las sustancias relevantes para la política aérea son también relevantes para la política climática y energética. Se han hecho todos los esfuerzos posibles para garantizar una estrecha coordinación entre las propuestas relativas a la calidad del aire y las que aplican los objetivos de la Unión en materia de gases de efecto invernadero y de energía.

Todos los sectores deberán contribuir a la aplicación efectiva de la política, incluidos los que, como la agricultura, han reducido menos en el pasado. La Comisión colaborará estrechamente con los Estados miembros y las partes interesadas para garantizar la obtención de los beneficios para la salud y el medio ambiente.

Más información

Questions and Answers on the new National Emissions Ceiling Directive

Review of the EU Air policy

Nota de prensa

http://europa.eu/rapid/press-release_IP-16-4358_en.htm

Bruselas, 14 de diciembre de 2016

Fuente: Comisión Europea - Comunicado de prensa

Esta entrada se publicó en Noticias en 20 Dic 2016 por Francisco Martín León