La Laguna Grande de Peñalara permite reconstruir el clima de los últimos 20.000 años

La Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Comunidad de Madrid participa en el “Proyecto de investigación PALEO-NAO”, que busca conocer cómo ha variado el clima de la Sierra de Guadarrama durante los últimos 20.000 años, gracias a la información almacenada en el sedimento de la Laguna Grande de Peñalara.

La Laguna Grande De Peñalara Permite Reconstruir El Clima De Los últimos 20.000 Años
Laguna Grande de Peñalara

Según un comunicado del Gobierno Regional, personal del Parque colabora en este proyecto, junto con diversos centros del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), diferentes universidades españolas y portuguesas, y el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX).

Así, en el sedimento quedan registradas las condiciones ecológicas existentes en el momento en que se depositó, en forma de señales físicas, químicas o biológicas, tales como la composición y magnetismo de los minerales, la cantidad de nutrientes y materia orgánica, o la presencia de restos de polen, algas microscópicas e invertebrados acuáticos.

En el invierno de 2015, un grupo de científicos del Parque Nacional ha llevado a cabo muestreos en la Laguna Grande de Peñalara mientras está completamente helada para poder extraer testigos de sedimento. El muestreo se realiza en invierno porque las bajas temperaturas permiten que se forme una capa de hielo lo suficientemente gruesa (en determinadas épocas supera un metro de espesor) como para soportar el peso del material de muestreo y del equipo investigador.

Para extraer estas muestras utilizan una broca del tamaño de una persona y un trípode de gran tamaño con un taladro que se coloca sobre la cubierta de hielo para poder extraer un testigo de sedimento de casi 2 metros de longitud. Este aparato ha sido utilizado también en la Antártida para la investigación. También se toman muestras de los microorganismos y algas que hay en la laguna para los mismos fines.

Estos trabajos de investigación limnológica se iniciaron hace más de 20 años con la creación del Parque Natural de Peñalara con el objetivo de mejorar el estado en el que se encontraba la laguna. Además, permiten tener información detallada y precisa del estado de los humedales de montaña del Parque.

Posteriormente, se unieron al grupo de trabajo de PALEO-NAO y la secuencia histórica de datos que aportan, que proporcionan una valiosa información sobre cómo varía el clima en el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama y en todo el mundo, en colaboración con investigadores de otros organismos.

Las muestras de sedimento sacadas se datan con carbono 14 para conocer la edad en la que se depositó cada una de las capas del sedimento, y poder poner fecha a cada uno de los cambios que se observan en el resto de las numerosas variables que se analizan, como la concentración de oxígeno disuelto, el pH y las muestras de microorganismos que habitaban en la laguna.

Fuente: IAGUA (www.iagua.es)

Esta entrada se publicó en Noticias en 09 Abr 2015 por Francisco Martín León