Refranes meteorológicos del mes de marzo

Luís Martínez Kleiser presenta algunos refranes de marzo: no tiene marzo mejor fama que febrero, aunque si menos renombre público de informal

Marzo, del latín MARTIUS, por el mes del dios Marte, el dios romano de la guerra

Marzo

No tiene marzo mejor fama que febrero, aunque si menos renombre público de informal:

Marzo engañador, un día malo y otro peor
Marzo marzuelo, un día malo y otro bueno
Marzo treinta y un días tiene y trescientos pareceres.
En marzo, la veleta ni dos horas se está quieta.
Marzo marzán, por la mañana cara de ángel y por la tarde cara de can.
Marzo marceador, de noche llueve y de día hace sol.
Marzo marcero, por la mañana rostro de perro, por la tarde valiente mancebo.
Marzo vuelve el rabo, y si al principio cordera, a la postre fiera.
Si al comienzo cordera, a la postre fiera.
Marzo, marzadas: aire, frío y granizada.
Marzo marcea y el gato rabea. No hay marzo bueno.
Marzo parejazo.

Se afirma en jocosa comparación del los parentescos colaterales;

Marzo, pardo por sol y malo,

se añade atribuyendo la etimología de marzo a la frase mal sol pronunciada con ceceo andaluz;

Ni de las flores de marzo, ni de la mujer sin empacho,

se concluye, para ponderar la desconfianza que inspira un mes cuyas variaciones hicieron fraternizar alabanzas y censuras:

A marzo alabo, si no vuelve el rabo

Su veleidad traicionera inspiro refranes dialogados muy expresivos:

Marzo, marzuelo, ya no te temo.
Con dos días que me quedan y otros dos que me preste mi compadre abril, te he de poner las ovejas que te has de acordar de mí.
Dijo el pastor a marzo: «Mal has tratado a mi ganado; allá te irás, donde no vuelvas más.» Y marzo le respondió: «Con tres días que me quedan y tres que me preste mi hermano abril, he de poner tus ovejas a parir.»
¿Un borrego quieres, marzo? Acábate de ir con el diablo. -Y respondió marzo: - Con tres días que me quedan y tres que me preste mi hermano abril, he de poner tus ovejas a parir.

Dice el pastor:

Marzo, marzuelo, tres días te quedan, ya no te temo.

y contestó marzo:

Con tres días que me quedan y tres que me preste mi hermano abril, todas las ovejas se te van a ir.

Marzo, marzueco, guárdame este morueco. -Yo te lo guardaré, pero el rabo le cortaré.

Y uno circunstancial, durante nuestra última guerra:

En marzo, el que no haya estirao la pata, estirará el brazo.

que así anunció la próxima supervivencia del viejo saludo romano. Realmente resulta muy peligroso para la salud este veleidoso mes. Queremos entregamos confiadamente a las primeras delicias del sol, que vuelve a lucir como hijo pródigo del cielo, y hallamos que

Sol de marzo pega.
Sol de marzo, sol de mazo.
Sol de marzo, pega como mazo.
En marzo, pega el sol como un pelmazo.
Los aires y los soles de marzo queman las dueñas del palacio.
Sol de marzo quema las dueñas del palacio, mas no las del ordenado.
Sol de marzo, quema las dueñas del palacio, mas no las del bien concertado.

Con tan ardoroso sol,

En marzo, floren todos los campos.
Marzo mal o bueno, el buey a la hierba y a la sombra el perro.
A quince de marzo, da el sol a la sombra y canta la alondra.
A quince de marzo, da el sol en la sombra y canta la golondrina.
San Raimundo trae la golondrina del otro mundo.
Por San José, los sapos se comienzan a ver.
En marzo, saca la cabeza el lagarto.
Marzo, los almendros en flor y los mozos en amor.
En marzo, si cortas un cardo nacerte han mil.

pero es dañino, como se dijo antes, y la experiencia previene a las mocitas:

Guárdate del sol de marzo y estarás hermosa todo el año.

Si el sol perjudica, ¡qué no hará el frío alternando con el sol!

Marzo, marzadas, aire frío y granizadas,

aunque sean breves las rachas del mal tiempo:

No dure más el mal de mi vecina que la nieve marcelina.
En marzo tronar, es cosa de extrañar.
Por la Encarnación los últimos hielos son.
Si marzo marcea, la vieja en el rincón se m...
Si marzo vuelve el rabo, no quedará oveja ni pastor enzamarrado.
Cuando marzo vuelve el rabo, ni deja carnero encerrado, ni pastor enzamarrado.
Cuando marzo vuelve el rabo, no deja oveja con pelleja ni pastor desamarrado.
Si marzo vuelve el rabo, no quedará cordero enalmagrado, ni pastor enzamarrado, ni carnero encencerrado.

Cuidado, pues, y en

Las tardes de marzo, arrecoge tu ganado.

La superstición vulgar atribuye gratuitamente a marzo un segundo peligro: el de que coincida con la Pascua:

Pascua en marzo, o hambre o mortandad.
Pascua marzal, hambre, guerra o mortandad.
Pascua marzal, miseria mortal.
Pascua marzal, o por mucho bien o por mucho mal.
Pascua marcelina, hambre canina.
Cuando cae la Pascua en marzo, se huelga el diablo.
Pascua en marzo, señal de mal año.
Pascuas marzales, hambrientas o mortales.
No puede más faltar que marzo de Cuaresma.

Para privamos de todo consuelo, se añade:

No hay marzo sin cuaresma.

Nunca escapa marzo de cuaresma.

y

Marzo siempre encuaresmado.

Resulta, pues, que la sentencia no tiene ninguna esperanza de absolución.

Con trazos vigorosos y firmes, ha dejado estampada el pueblo la silueta del mes. Esos mismos trazos procuró después convertirlos en

PRONÓSTICOS ATMOSFÉRICOS que, a su vez, orientarán los pronósticos agrícolas, acopiados en posteriores páginas.

Las nieblas predicen mal tiempo futuro:

Niebla de marzo, nieve de abril.
Niebla en marzo, heladas en mayo.
Nieblas en marzo, aguas en mayo.
Las nieblas de marzo serán heladas en mayo.
Cuando en marzo hay nieblas, mayo nieva o hiela.
Niebla de marzo, agua en la mano.

No es unánime la opinión a1 deducir consecuencias del viento; porque mientras unos dicen:

Viento marzal, buen temporal;

otros auguran:

Si marzo ventea, abril cantalea.
Si marzo marcea, abril aguanavea.

La nieve constituye una gran amenaza:

Cuando ve nevar San Ambrosio, hay frío para diez y ocho;

se supone que para dieciocho días.

Tampoco el calor y la sequía nos permiten esperar bonanza; sólo nos queda, pues, el consuelo de la buena cara para el mal tiempo sucesivo:

Las secas de marzo son lluvias en mayo.
Seco marzo, lluvioso mayo.
Si en marzo canta la rana, en abril calla.
Marzo que empieza bochornoso, pronto se vuelve granizoso.

PRONÓSTICOS AGRÍCOLAS. No quieren los labradores exceso de aguas en marzo:

En marzo, agua cuanto moje el rabo.
En marzo, cuanto moje el rabo al gato.
No ha de llover en marzo más de cuanto se moje el rabo al gato.
Marzo de lluvias cargado, año muy desgraciado.
Agua de marzo, peor que la mancha en el sayo.
En marzo, ni el mur mojado;

por reminiscencia latina, llama mur al ratón

Marzo, ni el mur mojado; las tres semanas que n las cuatro;

quiere que llueva en la cuarta semana. y también dice graciosamente:

Marzo, ni el mar mojado; las tres semanas que no las cuatro.
Más bien quiero en mi trigo una boyada, que en marzo una aguada.
Por marzo en los sembrados, ni la meada de un gato,

ya que resulta dañino para la siembra y la huerta, aunque sea conveniente para la campiña:

Marzo llueva para el campo, porque lo que es en la huerta, cada gota quita un cuarto.
Agua en marzo, hierbazo.
Lluvias en marzo, hierbas en los sembrados.
Las aguas marceras, son muy hierberas.

Como resumen de lo expuesto, se concluye:

Agua de marzo gobierna todo el año,

dando de lado el aserto gratuito:

Si en once de marzo rocío vieres, espera buen año; mejor si lloviere.

La nieve y el hielo se reciben con alegría.

Heladas en marzo favorecen los sembrados.
Nieve antes de marzo, oro blanco.

Los truenos desconciertan a los oráculos; es natural su indecisión, porque la influencia de las tempestades en este mes carece de importancia decisiva. Así pregonan unos:

Cuando en marzo oigas tronar, vende los bueyes y cómetelos en pan.
Si en marzo oyes tronar, vende la yunta y échalo en pan.
Si hay truenos en marzo, hasta el Obispo comerá pan bazo;

y responden otros:

Si en marzo oyes truenos, apuntala tu granero.
Si en marzo truena, los suelos de tu granero refuerza.
Cuando en marzo oigas tronar, ponle puntales a tu pajar.
Si en marzo oyes tronar, limpia tu era y barre el pajar.
Si en marzo truena, cosecha buena
Cuando en marzo truena, cosecha de almendra.
Cucando truena en marzo, alpareja los cubos y el mazo.
Truenos en marzo, aprieta las cubas con un mazo.

para resolver, en resumen:

Si en marzo oyes tronar, prepara la media y el costal, y que no sea para buscar.

Venga, en cambio, el calor; porque si bien en climas fríos se sabe que

El calor de marzo, temprano es para el campo,

en general

Calor de marzo temprano, es para el campo muy sano.
En marzo calor, temprano, es para los campos sano.
En marzo, al abrigo, nueces y pantrigo.
El sol de marzo, de riego sirve al campo.
En marzo, el sol riega y quema,

aunque salgan al paso contradictores para opinar:

El sol de marzo conmueve y no resuelve.

También los cielos cubiertos se consideran favorables:

Marzo pardo, señal de buen año;

y sólo deparan consecuencias tristes esas famosas rabotadas con las que nos dice adiós el invierno:

Arbolitos que estáis en flor, libraos de los bruscos de la Encarnación.
Si marzo vuelve el rabo, adiós tu ganado;

y la celebración de la Pascua dentro del mes, a juicio de los supersticiosos:

Pascua marzal, poca hierba y menos pan.

Luís Martínez Kleiser

Más refranes de marzo:

https://www.tiempo.com/ram/729/refranero-climtico-del-mes-de-marzo/

Esta entrada se publicó en Reportajes en 27 Feb 2015 por Francisco Martín León