Primera semana de mayo de contrastes: tormentas y cambios térmicos

Las borrascas que afecten a España cada vez son más de "tipo primaveral", con tormentas y vaivenes térmicos característicos dentro de un entorno de circulación en niveles altos que ofrece ondulaciones y una disminución paulatina de la intensidad de la circulación en chorro.

Primera semana de mayo con dos caras

La próxima semana tendrá, previsiblemente, dos caras, como una moneda. La presencia de dos bajas atlánticas durante la primera parte de la semana traerá precipitaciones, muchas de ellas de carácter tormentoso en la Península y Baleares. De hecho, una de estas bajas podría pasar al Mediterráneo inestabilizando la zona.

La segunda parte de la semana se caracterizará por la presencia de una dorsal atlántica que generará una estabilización de la atmósfera, en términos generales.

2-4 de mayo: tiempo tormento con bajada de temperaturas

La presencia de dos bajas atlánticas, una que nos traerá vientos de componente noroeste y otra con vientos de más del norte, nos traerá precipitaciones generalizadas en el interior peninsular y Baleares, muchas de las cuales irán acompañadas de tormentas en el interior y este peninsular.

Una de las bajas aludidas podría pasar al Mediterráneo y dejar precipitaciones y tormentas en el este y Baleares.

Los vientos de componente noroeste y norte harán que las temperaturas diurnas desciendan, después de unos días donde se han superado los 20 º y 25 ºC, e incluso más, en amplias zonas de la Península, a finales de abril. No se esperan heladas, salvo en zonas muy altas.

El miércoles se mantiene como un día de transición con una disminución de la inestabilidad aunque las precipitaciones se podrían dar en el norte, zonas del este, Baleares y Melilla. Las temperaturas podrían experimentar un repunte empezando por el oeste.

Segunda parte de la semana, 5-8 de mayo: tendencia a la estabilización

Con las lógicas incertidumbres, se prevé que el jueves y el viernes las precipitaciones podrían ir a menos y quedar reducidas a las zonas del norte: cantábrico, Pirineos y puntos del sureste peninsular.

Es posible que el fin de semana se presente estable, sin precipitaciones con tiempo seco y soleado con subida de temperaturas siendo las normales para la época. Algunos restos de precipitaciones se podrían dar por el tercio norte peninsular y puntos del área mediterránea.

Para Canarias se espera que soplen los alisios durante toda la semana, estando, por lo tanto, al margen de esta situación. Las temperaturas cambiarán poco a lo largo de la semana.

Los resto de polvo en suspensión que han aparecido estos días sobre España tenderán a desaparecer a lo largo de la semana que viene.

En resumen, mayo comenzaría con tiempo primaveral con una semana con dos caras en la primera semana del mes: tiempo inestable y fresco en la primera parte de ella, y una segunda parte más estable y soleada, con temperaturas al alza.

Mayo primaveral en estado puro.