El año hidrológico 2012-2013: evaluación a julio de 2013
El año hidrometeorológico 2012-2013 se confirma, a falta de sólo un mes para su finalización, como un año muy húmedo en gran parte de España.
La precipitación media acumulada desde el 1 de septiembre hasta el 31 de julio supera ya los 805 mm, lo que representa en torno a un 30% más que el valor normal para este período y supone ya cerca de un 25% más que el valor medio normal para el año hidrometeorológico completo cuando aun queda el mes de agosto. Un hecho poco usual es que el año resulta simultáneamente húmedo en casi toda España, si bien la anomalía positiva de precipitaciones es más importante en el tercio sur y en torno al valle del Ebro.
Si se considera la distribución espacial de las precipitaciones acumuladas en estos últimos once meses, se observa que tan sólo en áreas de extensión muy reducida sobre el centro y sureste peninsular y en las islas orientales de Canarias, estas precipitaciones quedan ligeramente por debajo de los valores normales. En cambio en la Rioja, Navarra, noroeste de Aragón, parte del País Vasco y sur de Castilla-La Mancha, así como en parte de las islas occidentales de Canarias y en amplias áreas del centro y este de Andalucía las precipitaciones acumuladas superan en más de un 50% su valor normal. En una amplia zona que abarca la provincia de Jaén y parte de las de Córdoba, Granada y Ciudad Real, así como en otra más reducida sobre Navarra las precipitaciones llegan a superar en más de un 75% su valor medio.
Si se analiza la distribución de las precipitaciones del presente año a lo largo de las estaciones, se observa que el otoño resultó húmedo a muy húmedo en la mayor parte de España y el invierno fue de precipitaciones prácticamente normales en conjunto, en tanto que la primavera resultó también muy húmeda en general, debido sobre todo a la excepcional pluviosidad del mes de marzo.
Los dos meses que han transcurrido del presente verano han sido en conjunto de precipitaciones normales a ligeramente inferiores a las normales, con una precipitación media sobre España en junio-julio del orden de los 50 mm frente a un valor medio normal de 60 mm. Como es habitual en los meses veraniegos, tanto en junio como en julio la distribución geográfica de las precipitaciones fue muy desigual.
Así, junio fue húmedo a muy húmedo en el tercio norte peninsular, especialmente en el País Vasco, Navarra y noroeste de Aragón, así como en el norte de Valencia, donde las
p r e c i p i t a c i o n e s mensuales superaron en general el doble de los valores medios del mes, mientras que en el resto de España fue bastante seco, con precipitaciones por debajo del 25% del valor normal en el tercio sur y en el centro peninsular, así como en la mayor parte de
Baleares y Canarias.
Julio resultó húmedo a muy húmedo en Castilla y León, la Rioja, Aragón, Cataluña, sur de Navarra, interior de Valencia y sureste de Castilla-La Mancha y fue normal a seco en el resto, siendo destacable el notable déficit de precipitaciones en este mes en las áreas costeras de la vertiente cantábrica, especialmente acusado en Asturias.
Como es habitual en estas fechas, a finales de julio de 2013 los suelos están ya secos a muy secos en todas las regiones, salvo en las de la franja norte peninsular que se extiende desde el norte de Galicia hasta el norte de Cataluña, así como en zonas del Sistema Ibérico, donde aun mantienen niveles de humedad significativos, que son más elevados en la zona de Pirineos.
Antonio Mestre
Fuente: El Observador AEMET