Agua en botellas de plástico, cáncer y calor

En determinadas ocasiones se oye “No dejes botellas de plástico con agua dentro del coche en verano, porque desprende sustancias cancerígenas con temperaturas altas” ¿Qué hay de cierto en ello?

Agua En Botellas De Plástico, Cáncer Y Calor

Se ha oído un consejo insistente de no tomar el agua de botellas de plástico que se hayan podido recalentar dentro de un choche o que han sido dejadas en una ventana en un día caluroso de verano, con su reutilización posterior.

Desgraciadamente el uso del plástico está aumentando a unos niveles preocupantes en todo el mundo (recordar que existen continentes de plásticos de las basuras arrojadas a los océanos). España es un país consumidor de plásticos y más concretamente de botellas de agua embotellada.

La mayor parte de ellas utiliza envases PET (politereftalato de etileno), donde el antimonio es uno de los componentes. El antimonio puede ser tóxico (al igual que otros componentes de los plásticos) e, incluso, mortal si se consume unos 100 mg. Se estima una persona ingiere unos 0,5 mg/día desde diversas procedencias.

Es lógico pensar que el antimonio y otras sustancias podrían pasar al agua contenida en las botellas. Para evitar riesgos para la salud humana (cáncer, problemas de estómago, etc.) se han establecidos unos limites y regulaciones en este sentido.

Para el antimonio en Europa ello se traduce en un límite máximo de 5 ?g/L (directiva 2003/40/CE de la Comisión de las Comunidades Europeas), mientras que en EE.UU. se fija en 6 ?g/L y la de la OMS es de 20 ?g/L.

Algunos estudios muestran que ciertas circunstancias, como plásticos de mala calidad no regulados, el envejecimiento, el calor, los múltiples rellenados, etc., podrían tener implicaciones sobre la salud. Pero no solo en las botellas de plásticos para el agua sino para otros líquidos (zumos, sangrías, vinos, aceites, vinagres, etc.)

Cada vez la normativa es más estricta y los tipos de plásticos que se fabrican ahora hacen que ciertos aditivos del plástico no pasen como antes al líquido, y si lo hacen, en menos proporción. Es conveniente y necesario seguir investigando sobre estos temas, y hacer cumplir la normativa, con plásticos menos contaminantes y potencialmente dañinos para la salud.

De cualquier manera sería aconsejable ser más cuidadoso en este tema, el uso botellas de plástico con contenidos líquidos, y en otros donde el plástico esté presente (basta ir a un supermercado y ver cuantos alimentos están encarcelados dentro de plásticos: muchísimos, es parte de nuestra vida. No reutilice las botellas de plástico con frecuencia, no las deje al sol, no las exponga a cambios bruscos de temperatura, etc.

Pero hay alternativas, al menos para los líquidos: usemos más botellas de vidrio para almacenar agua, por ejemplo, y no dejemos envejecer las botellas de plástico o no las sometamos a temperaturas altas o a la acción prolongada de la luz solar.

Posiblemente le estemos prestando mucha atención a los plásticos en tema de salud y, por el contrario, estamos prestando menos a la comida basura que poseen más conservantes, edulcorantes, grasas, especias, etc., algunos de ellos potencialmente cancerígenos.

Más sobre botellas de plástico en: https://es.wikipedia.org/wiki/Botella_de_pl%C3%A1stico

Esta entrada se publicó en Actualidad en 31 Jul 2017 por Francisco Martín León