Refranes meteorológicos de noviembre
Refranes meteoclimatológicos del mes de noviembre: Dichoso mes que entra en Todos los Santos y sale con San Andrés
NOVIEMBRE. Artículo de noviembre de 2005. Luis Martínez Kleiser
Dichoso mes que entra en Todos los Santos y sale con San Andrés
así dicho porque
Dichosito mes, que entras con Todos los Santos,
medias con San Eugenio y sales con San Andrés.
Dichoso el mes que entra con tostones y sale con chicharrones
Es un MES DEMASIADO FRÍO para regalarnos bienestar:
San Andrés, agua o nieve ha de traer,
Cuando San Andrés viene, o trae agua o nieve.
Por San Andrés, la nieve en los pies.
Por San Andrés, toda mosca muerta es.
Así se despide noviembre; y en cuanto a su principio:
Por Todos Santos, los campos blancos.
Por Todos Santos, la nieve en los campos.
Por Todos los Santos, campos verdes y montes blancos.
Por Todos los Santos, hielo en los altos;
Por San Andrés, hielo en los pies.
Por los Santos, la nieve en los altos, y por San Andrés, en los pies
Encerrados entre dos fechas de trato tan inclemente para los hombres, sus días no pueden ofrecérsenos más bondadosos;
Por Santa Catalina, la nieve se avecina
Por Santa Catalina, la nieve en la cocina.
Por Santa Catalina, el frío se afina.
Por Santa Catalina, prevente de leña y harina.
Se dice, pues, con justicia:
Al rigor de la temperatura, contribuye la grave circunstancia de no favorecemos el sol más que con visitas de cumplido en sus DIAS FUGACES:
Si nieva por San Andrés, nieva mucho más después.
Hombres y animales buscan refugio al calor de las lumbres y al abrigo de los pesebres, cambiando de ALIMENTOS, en relación con los meses anteriores:
Por Santa Catalina, la berza es gallina.
Por San Andrés, a tu ánsar pan des.
Por San Martino, bebe tu vino y deja el agua para el molino.
Por San Martín, abre la espita al tonel y bebe de él.
LAS FAENAS AGRICOLAS sobre los hombros del labrador como en las jornadas estivales, porque ahora es para él defensa lo que antes fue tortura. Muchas se han debido dar ya por terminadas:
Quien no ha sembrado en noviembre, que no siembre.
A primeros de noviembre, quien no sembró que no siembre.
Todo en noviembre, guardado, o en tu casa o enterrado.
Noviembre, todo guardado, o en tu casa o enterrado.
por Todos los Santos, los trigos sembrados y todos los frutos en casa encerrados.
Si no has sembrado en noviembre, ya no siembres.
En noviembre, si no has sembrado, no siembres,
En noviembre, el que tenga que siembre.
En lloviendo por los Santos, siembra, aunque sea en un canto.
A más tardar, por los Santos el trigo has de sembrar.
Por Todos los Santos, a más tardar, el trigo has de sembrar.
Por Todos Santos, siembra trigo y coge cardos.
Por Todos Santos, siembra con dos manos.
Para Todos los Santos, siembra tus campos.
Por Todos Santos, siembra tu trigo y prueba tu vino.
Quince días antes de Tosantos y quince después, sementera es.
Por San Martín, siembra el ruin.
Por San Andrés, lo que había de sembrarse, sembrado esté.
Por San Andrés, sementera es; por Santa Catalina, sementerina.
Por Santa Catalina, del trigo que no sembraste haz harina.
Por la fiesta de San Clemente, cuanto trigo siembres pierdes,
San Climen, alza ira mano de simien.
y a la vez que las mieses, siémbrense también los productos que reclama la tierra en el mes de los Santos.
Ajo, ¿por qué fuiste ruin? -Porque no me sembraste por San Martín. Dice el hortelano al ajo: -¿Cómo has salido tan ruin? -Porque me sembraste después de San Martín.
Como la madre tierra nunca se cansa de ofrecernos sus dones, también se han de recoger los productos que ya están en sazón:
Por Santa Catalina, coge tu oliva, y la vieja que lo sabia, cogida la tenía,
y si demoras su recolección, te la puede derribar el viento, llamado vareo donosamente por un refrán:
A la vez que las olivas, como es
Noviembre, mes de batatas, castañas y nueces,
no se han de dejar olvidadas en la huerta o en el árbol, del mismo modo que los nabos y las piñas:
Por Todos Santos, mira tus nabos; si fuesen buenos, di que son malos;
Por los Santos, aunque sean cantos.
Por Todos Santos, rebusca de dos granos;
por San Andrés, ni de dos ni de tres.
En buen tiempo, San Andrés, guarda los higos para él.
Pocas faenas más separan al labrador del fogaril a lo largo del mes de noviembre.
Únicamente,
porque, aparte tal labor,
En noviembre, de cavar no se te miembre;
y el astil de cavar, quiébrale en ahoyar.
A San Andrés, no ararle los pies.
Olivar plantado en noviembre, él lo dice aunque tú no lo mientes;
Día de San Martino, prueba tu vino.
Por San Andrés, vino es.
En llegando San Andrés, el vino nuevo añejo es;
y para colmo de venturas gastronómicas, los regocijos prometedores de la matanza; el advenimiento de blancos corderitos, espléndido regalo de las ovejas en esos días; y el diezmo pagado, por las aves de corral, caras de sostener en la época de pobre postura:
y por San Nicolás, el gallo matarás.
Por San Andrés, corderitos tres.
Por San Andrés, mata tu res, mala o buena, o como es.
Por San Andrés, mata tu res, gorda o flaca o como esté.
Tu cochino, para San Martino.
Por San Martín, mata tu guarrín y destapa tu vin.
Por San Martín, deja el puerco de gruñir.
Por San Martino, prueba tu vino y mata tu cochino.
Por Santa Catalina, mata tu cochina; por San Andrés mata tu res,
y si no tienes que matar, mata a tu mujer.
Por San Andrés, el que no tenga cochino que mate a su mujer.
Día de San Andrés, quien no tiene puerco mate a su mujer.
Por San Andrés, hay puercos gordos que vender.
Ni aún pueden producir preocupaciones los PRONÓSTICOS AGRICOLAS, indecisos y hasta contradictorios, por lo mismo que aun tienen escasa influencia en los campos los agentes atmosféricos. Basta leer:
a la vez que lo contrario:
vende los bueyes y échalo en pan.
y esto es cuanto nos ofrece noviembre, en cuyo curso, según las ciencias astronómicas populares, los astillejos Castor y Polux de la constelación Géminis, se nos presentan:
Luis Martínez Kleiser