Los ríos árticos descargan más agua dulce en el océano, reflejando los cambios existentes en el ciclo hidrológico de latitudes altas

AGUA-NASA Los ríos que vierten en el océano Ártico le aportan cada vez más agua dulce.Los ríos de altas latitudes están descargando más cantidad de agua dulce en el océano Ártico, debido a la intensif...

Los ríos que vierten en el océano Ártico le aportan cada vez más agua dulce.Los ríos de altas latitudes están descargando más cantidad de agua dulce en el océano Ártico, debido a la intensificación de la precipitación causada por calentamiento global, han afirmado los investigadores del Centro Hadley para la Predicción e Investigación del Clima en el Reino Unido.El intercambio de agua entre el océano, atmósfera y la tierra se le llama ciclo hidrológico global. Mientras que el clima de la tierra se calienta, se espera que el índice de este intercambio aumente. Como parte de este proceso, se espera que la precipitación aumente en las altas latitudes y, por lo tanto, la descarga de los ríos también crezca. Esto podía cambiar la distribución del agua en la superficie de la tierra, con consecuencias sociales y económicas importantes.Podría también alterar el equilibrio del sistema del clima en sí mismo, tal como la circulación atlántica del termohalina, una clase de banda transportadora de agua oceánica. El agua fría fluye hacia el sur en el Atlántico en las grandes profundidades a las zonas tropicales, en donde se calienta, se eleva, y vuelve hacia el norte cerca de la superficie. Este flujo ayuda a la subsistencia y al mantenimiento de la Europa norteña con un clima templado, mientras que en las mismas latitudes en Norteamérica las regiones son más frías, predominando la tundra o taiga.Los investigadores Peili Wu, Richard Wood y Peter Stott del Centro Hadley compararon los datos de observación divulgados en la revista Science en 2002 por Peterson y otros con las simulaciones modelo producidas por Hadley. Ellos esperan que las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por el ser humano intensifiquen el ciclo hidrológico ártico, lloviendo más sobre tierra y el mar, con más escorrentía en los ríos, etc. El aumento de la precipitación ártica es balanceada con la disminución de la precipitación en las zonas tropicales.Wu y sus colegas probaron el modelo con varias simulaciones que consideraban los factores humanos y factores naturales, incluyendo variabilidad solar y erupciones volcánicas. Los resultados demostraron un aumento constante en descargas de los ríos árticos, especialmente desde los años 60. El coeficiente de incremento anual desde 1965 era de 8.73 kilómetros cúbicos por el año, bastante más grande que la tendencia a largo plazo.Intentando determinar la fuente de la tendencia ascendente en las décadas recientes. Sus simulaciones excluyeron los impactos humanos, en un caso, y los impactos naturales en otro, e incluyeron todos los factores en un tercero.Concluyeron que si no se tiene en cuenta los efectos del ser humano, el ciclo hidrológico no habría mostrado ninguna tendencia en todo el siglo XX. Si se tenía en cuenta el efecto del ser humano y no los efectos naturales, Wu y sus colegas afirman que la tendencia a largo plazo es el 50 por ciento más alta que cuando todos los factores eran considerados. Concluyen que, sobre las últimas cuatro décadas la actividad humana desempeñó el papel principal en los flujos crecientes del agua fresca vertida por los ríos en el Ártico.Los datos observados confirman las predicciones del modelo del clima del Centro Hadley, con respecto a los efectos humanos. Es probable que la tendencia ascendente en los cambios del flujo de los ríos sea parte de los primeros estados de un ciclo hidrológico intensificado.El texto fue tomado de http://www.agu.org/sci_soc/prrl/prrl0502.html y de:http://earthobservatory.nasa.gov/Newsroom/MediaAlerts/2005/2005011918200.htmlQue se corresponde con esta nota de 19 de enero de 2005 de la AGU: Release No. 05-02 American Geophysical Union.Título"Human influences on increasing Arctic river discharges"AutoresPeili Wu, Richard Wood, Peter Stott, Hadley Centre for Climate Prediction and Research, Met Office, Exeter, United Kingdom.Referencia.Wu, P., R. Wood, and P. Stott (2005), Human influences on increasing Arctic river discharges, Geophys. Res. Lett., 32, L02703, doi:10.1029/2004GL 021570

Esta entrada se publicó en Noticias en 12 Mar 2005 por Francisco Martín León