Semana de borrascas: mañana Gabriel y el jueves ¿Helena?

Se avecina una semana bastante borrascosa. Los temporales no golpearán directamente la Península, más bien a Francia, pero los frentes asociados también dejarán aquí precipitaciones y nieve entre bastante viento. Hoy el tiempo ya ha ido por ese camino, pero no ha sido más que una caricatura de lo que está por venir. Salvo en Pirineos, donde las nevadas sí que han sido copiosas.

Mañana notaremos la borrasca Gabriel

Esta tarde las imágenes del satélite visible dejan entrever una pequeña borrasca que fondea el Atlántico. En los mapas sinópticos apenas traza una onda, pero los modelos de predicción auguran una ciclogénesis explosiva que llevará a la depresión, bautizada como Gabriel, a dejar mañana un temporal de campanillas en el Golfo de Vizcaya.

Aquí se notará, sobre todo, en el extremo norte de la Península Ibérica. Hasta avanzada la madrugada lloverá de forma débil en Galicia, el litoral Cantábrico y Pirineos, con una cota de nieve de entre 800 y 1000 metros. A lo largo de la mañana las lluvias ganarán extensión e intensidad, y ya serán moderadas en estas zonas. Por la tarde podrá llover en cualquier punto de la mitad norte de la Península y Baleares. También caerán algunas gotas en el interior sur y en la cara septentrional de las islas Canarias de mayor relieve. El blanco meteoro aparecerá a partir de los 900 o 1000 metros en la Península, algo más abajo en el norte.

El viento presentará rachas fuertes en puntos del norte, interior sureste peninsular y la desembocadura del Ebro. En el Cantábrico las olas podrán llegar a los 7 metros (consulta los avisos de la AEMET).

No habrá tregua hasta el fin de semana

Tras Gabriel, y unas pocas horas de tiempo más apacible el miércoles, llegará otro centro de bajas presiones. La tarde de este mismo día volverá a deparar lluvias en la mayor parte del país; más intensas y extensas en el noroeste peninsular y menos cuanto más hacia el sureste. El jueves hasta la tarde será un día bastante nuboso, pero con precipitaciones débiles de distribución irregular. Después la última borrasca de la semana reactivará los chaparrones que se desplazarán de oeste a este. Probablemente, se disiparán antes de llegar al Mediterráneo.

El viernes será un día de chubascos post frontales y nieve en cotas no demasiado altas. En Pirineos el blanco meteoro podría aparecer casi a cualquier cota, en la mitad norte a partir de los 300/600 metros y en el sur y Baleares de los 1000 metros. El litoral oriental peninsular un día más quedará al margen. El ambiente será frío y el viento arreciará.

Entre el sábado y el domingo la inestabilidad irá retirándose, quedando solo algunas precipitaciones en el Cantábrico oriental y Pirineos. Aunque esto último habrá que confirmarlo en próximos días. No nos desprenderemos de las chaquetas.