Previsión de Samuel Biener para la segunda quincena de noviembre: el chorro polar podría traer un giro radical de tiempo

Esta semana predominará el tiempo estable y anormalmente cálido para las fechas en gran parte de España, pero en unos días las ondulaciones del chorro polar podrían traernos cambios. Así podría ser la segunda quincena de noviembre.

Tiempo segunda quincena de noviembre España
En unos días el anómalo veranillo de San Martín que afecta a España podría dejar paso a una situación más típica de las fechas, con frío e incluso nevadas. Aquí te contamos lo que podría pasar.

La primera parte de noviembre ha transcurrido con sucesión de sistemas frontales que han dejado precipitaciones abundantes y generales en la vertiente atlántica, para dejar paso en estos días a una masa de aire extremadamente cálido para las fechas, con temperaturas que incluso han superado los 30 ºC en la costa mediterránea.

La dorsal anticiclónica ha irrumpido con fuerza, aunque las lluvias todavía persisten en el extremo septentrional. Durante las últimas semanas hemos tenido un buen repertorio de fenómenos meteorológicos, varios de ellos extremos, y todo parece indicar que en la segunda quincena del mes la estabilidad no se va a imponer de forma aplastante.

Chorro polar
La semana ha comenzado con una situación clásica de NAO positiva: chorro polar muy fuerte, con vientos de más de 200 km/h a unos 9000 metros y borrascas profundas que circulan por latitudes altas.

Como ya hemos explicado en Meteored, en las próximas jornadas predominará el tiempo estable en gran parte de España, con temperaturas anormalmente altas en la gran mayoría de las regiones peninsulares y en ambos archipiélagos, con posibles récords en el este. Las precipitaciones continuarán restringidas a Galicia y en el tercio norte. Eso sí, la situación probablemente cambiará a partir del fin de semana.

La semana que viene podría llegar el aire polar

De acuerdo con nuestro modelo de referencia, a partir del lunes parece probable que el chorro polar presentará importantes ondulaciones, configurándose una situación de bloqueo en omega en el Atlántico Norte, con las altas presiones ascendiendo hacia latitudes más altas, mientras que los descuelgues de aire frío se deslizarían por los flancos de la dorsal anticiclónica.

Habrá que ver por donde ascienden las altas presiones, pero el escenario más probable a día de hoy muestra que se abrirá el pasillo al viento del norte o noreste, por lo que el aire polar o ártico tendrán vía libre para llegar a la península, con un descenso notable o extraordinario de las temperaturas tras el calor de esta semana.

La incertidumbre es muy alta teniendo en cuenta los plazos y el tipo de configuración atmosférica, pero habrá que ver si los descuelgues de aire frío sobrevuelan la península y los archipiélagos, lo que traería además inestabilidad, o si afectarán principalmente a la cuenca occidental del Mediterráneo. Con predominio de nortes, las precipitaciones se quedarían restringidas al extremo septentrional.

Chorro polar
Nuestro modelo de referencia muestra que es bastante probable una situación de circulación en omega en el Atlántico Norte (bastante evidente en esta imagen), por lo que el aire frío y la inestabilidad podrían acabar llegando a nuestro territorio.

Lo que sí parece claro es el esperado descenso de las temperaturas, y de cumplirse este escenario hablaríamos de un ambiente fresco o frío, con heleadas más intensas y generalizadas y nevadas en cotas medias o medias-bajas. Tampoco hay que descartar que se instale el anticiclón sobre la península, pero con valores térmicos ya más normales para las fechas.

¿Noviembre acabará con nevadas en España?

A partir de la próxima semana, la situación está muy indefinida y nuestro modelo de referencia plantea varios escenarios, por lo que tendremos que ir concretando más adelante. En los últimos días de noviembre el anticiclón podría echarse encima de la península poco a poco, por lo que volvería el ambiente estable y con temperaturas que se recuperarían.

No obstante, hay otros que señalan que podría generarse un anticiclón de bloqueo en el entorno del mar del Norte, lo que facilitaría que las borrascas pudieran circular por latitudes mucho más bajas, afectando a España. E incluso tampoco hay que descartar la opción de que la configuración en omega persista unos días más en el Atlántico.

Aunque estamos insistiendo en los conceptos de incertidumbre y dispersión, lo que sí parece evidente es que la atmósfera se va a mostrar más dinámica dentro de unos días, lo que abriría las puertas a otro tipo de situaciones más típicas de la época del año en la que estamos. Para estar bien informado de este probable cambio de tiempo, no te olvides de consultar la página web y la app de Meteored.