Propósito 2020: Venecia y cambio climático, ¿hay que visitarla ya?

Vistos los últimos acontecimientos ocurridos en Venecia con las sucesivas inundaciones, mucha gente se plantea visitarla antes de que sea imposible hacerlo por el cambio climático. ¿Estamos exagerando?

Venecia
Venecia podría quedar inundada dentro de unos años

Muchos de los deseos para este 2020 que hemos escuchado en Fin de Año por parte de famosos y políticos han estado relacionados con el cambio climático. Parece que de una vez por todas la concienciación se ha generalizado y ya todos tenemos claro que hay que ponerle freno. Hasta ahora solo la población pedía compromisos a los mandatarios, pero esto ya ha cambiado.

En los últimos dos meses del año pasado la palabra emergencia ha ido ligada al cambio climático. La Cumbre de Madrid ha tenido gran parte de culpa. Pero hay algo que nos debería hacer reflexionar a los que nos dedicamos a la divulgación científica, así como a todos los medios de comunicación en general: la alarma creada. ¿Es justificada? En parte, sí.

Una de las señales de que esto ha sido así es la cantidad de gente que comenta la urgencia en visitar Venecia antes de que el cambio climático la haga desaparecer. O ir a islas del Pacífico antes de que el aumento del nivel del mar las borre del mapa. O subir a esquiar ahora que la nieve abunda, algo que no sucederá en unos años por el aumento de las temperaturas.

¿Hay que afanarse en visitar Venecia?

Antes de nada, hay que saber identificar si el cambio climático es el principal culpable de algo como lo que está ocurriendo en Venecia. Efectivamente, tiene una pequeña parte de culpa, pero no toda. Esto lo podemos extrapolar a cualquier tipo de desastre que ocurra en estos momentos en la naturaleza.

Este año los episodios de Acqua Alta han sido más intensos y duraderos que en anteriores. Los motivos que la han provocado han sido un aporte de lluvias importante por parte de los ríos que han llenado más aún la gran laguna, un fuerte viento de componente sureste que arrastra más agua de mar hacia la costa, la poca presión atmosférica y, como no, la típicas mareas que se dan en todos los puntos marítimos por el efecto de la luna.

Uno de las consecuencias del cambio climático es el aumento del nivel de mar. Venecia es uno de los puntos críticos al estar oficialmente a 1 metro de altitud. El sistema MOSE para evitar las inundaciones sigue en marcha y según las previsiones, debería aliviar los dolores de cabeza a los habitantes de la zona, aunque para los turistas es toda una atracción.

Pero a la pregunta de si hay que ir corriendo a visitar Venecia, la respuesta es que no hace falta correr. Al menos, nosotros no veremos Venecia bajo el agua. Sí quizá más episodios como este, pero no su desaparición total. Eso sí, en 2100 ya podría quedar inundada por completo según un estudio de la Agencia Nacional Italiana para las Nuevas Tecnologías, la Energía y Desarrollo Económico Sostenible (ENEA).

Qué ocurre con los otros destinos en el mundo

Lo mismo que hemos comentado en el caso de Venecia, que tarde o temprano podría desaparecer, ocurrirá con esos lugares que por su localización pueden sufrir seriamente los efectos del cambio climático. En la mayoría de casos no hace falta correr, pero podríamos notar algunos cambios en estos destinos. Las próximas generaciones sí que se pueden encontrarse con el problema de que algunos sitios hayan desaparecido.

Hay que recordar un caso reciente de hace un par de años. Un grupo de islas del Pacífico desapareció por, supuestamente, el aumento del nivel del mar. Fueron las islas de Kale, Rapita, Rehana, Kakatina y Zollies. Aunque indagando un poco más, no fue solo por el aumento de las aguas, sino también por el oleaje y la erosión.