Se nos avecina otro mes tormentoso en…

Hablamos de una zona que va a seguir probablemente lo que queda de mes con la tónica de tardes tormentosas, sobre todo en el entorno de sus diversos sistemas montañosos. Tampoco se pueden descartar granizadas o fuertes rachas de viento.

Imagen de una tormenta multicelular cazada el pasado 7/7/2018 en Castilla y León (Burgos).

Por el oficio que tenemos la suerte de desempeñar desde el equipo de @stormchasers, nos solemos encontrar mientras tomamos los vídeos de la caída de rayos bastantes curiosos oriundos del lugar que nos preguntan por nuestra actividad. En estas conversaciones lo que nos suelen transmitir es que hemos llegado al lugar apropiado, porque está habiendo muchas tormentas en los últimos meses, que por desgracia para algunos de ellos están siendo perjudiciales para la agricultura. Parece ser que esta tónica seguirá unas semanas más.

La comunidad autónoma que más hemos visitado las últimas semanas y a la que, previsiblemente, volveremos ha sido Castilla y León. Se trata de la Comunidad Autónoma más elevada de la Península Ibérica, con una media de cerca de 900 metros de altitud sobre el nivel del mar. Siendo una gran meseta rodeada de cordilleras, lo normal hubiera sido ya inmersos en pleno verano tener que ir a buscar las tormentas a puntos muy concretos como el Bierzo o la Ibérica soriana. No obstante, la dinámica tan activa que viene siguiendo la atmósfera en nuestras latitudes está implicando que las zonas más bajas de la meseta, como Valladolid, estén registrando tormentas iguales o incluso más fuertes que las que se dan en las zonas montañosas.

Otras comunidades autónomas de la mitad norte de la Península también están sufriendo las inclemencias meteorológicas de las tormentas en una época donde no suele ser tan habitual, de hecho en el Aeropuerto de Zaragoza a principios de mes se batió el récord de viento de los últimos 60 años: 157km/h. También en Aragón, en diversas zonas se han reportado a lo largo de las últimas semanas granizadas de gran tamaño.

¿A qué se debe esta situación tan anómala? ¿Continuará con nosotros el tiempo inestable?

Todos estos fenómenos meteorológicos adversos afectando a zonas nada habituales están asociados a una mayor presencia de vaguadas o Depresiones Aisladas en Niveles Altos (DANAS) en el oeste o noroeste de la Península Ibérica. Si analizamos un poco la situación desde mediados de primavera, y lo que vienen mostrando los modelos para los próximos días, es la ubicación del anticiclón de las Azores, más hacia el oeste y norte de lo normal, quien dirige más hacia el sur de lo habitual la corriente en chorro que nos trae la inestabilidad. Dado que inercias atmosféricas como esta que describimos tienden a perdurar en el tiempo y los modelos a medio y largo plazo muestran consenso al respecto, no es para nada descabellado pensar que al menos en la mitad norte de la Península Ibérica seguiremos este mes con tiempo tormentoso.