El Niño en su máximo

El fenómeno de El Niño en el Pacífico ecuatorial se encuentra ahora en plena madurez.

Figura 1: Anomalía de la temperatura de la superficie del océano de noviembre 2015 (fuente Mercator Ocean). El Niño es claramente visible en el Océano Pacífico en el ecuador (más caliente que las aguas normales de rojo a amarillo). Tenga en cuenta la posición de la “caja o región Niño3.4” que se utiliza para el seguimiento del fenómeno de El Niño.

Para seguir su evolución, los climatólogos monitorean un área geográfica denominada "caja o región Niño 3.4", que cubre aproximadamente el centro del Océano Pacífico ecuatorial (Figura 1). En esta área, la anomalía de la temperatura superficial del mar ha superado temporalmente + 3 ° C a finales de noviembre y es, en promedio, a + 2,9 ° C (Figura 2) a lo largo del mes. Este valor coloca el evento actual de El Niño a un nivel comparable al del evento 1997/1998 que se mantuvo de lejos como el más fuerte registrado desde que comenzaron las mediciones en la década de 1950.

Figura 2: Evolución mensual de las anomalías de la temperatura superficial en la región Niño 3.4 desde diciembre de 2013 (fuente de Mercator Ocean).

El fenómeno, impacta directamente durante varios meses en toda la zona del Pacífico, así como todas las regiones tropicales. Además, influye significativamente en todo el sistema climático océano-atmósfera, ampliando sustancialmente su inercia. Por lo tanto, la previsibilidad de la evolución del sistema climático se fortalece. Las simulaciones de diversos modelos de pronósticos estacionales de todo el mundo son por lo tanto particularmente consistente. Indican que el fenómeno de El Niño ha tocado techo y que las anomalías de la temperatura superficial del mar en el Pacífico ahora comenzará una disminución, que se acelerará en los primeros meses de 2016 (Figura 3).

Figura 3: Anomalías de la temperatura superficial en la zona "Niño3.4" bajo los modelos por conjuntos EUROSIP (Météo-France, Pronóstico del Tiempo Centro europeo a medio plazo, Met Office, Centros Nacionales para la Predicción del Medio Ambiente). En azules punteadas: Observaciones de los últimos meses, en naranja y amarillo: el pronóstico para los próximos meses. El 50% de las simulaciones se encuentran en la parte de color naranja oscuro de la pluma, 15% adicional en cada región adyacente de color naranja claro, y sin embargo, un 8% en cada zona de color amarillo. El penacho muestra la disminución de las anomalías previstas durante los primeros meses de 2016.

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18 dic 2015
Fuente: Météo-France

Esta entrada se publicó en Actualidad en 24 Dic 2015 por Francisco Martín León