La OMM participa en un ejercicio del Organismo Internacional de Energía Atómica de respuesta a una "bomba sucia"

Varios observadores meteorológicos participaron en un ejercicio de emergencia de dos días de duración en el que tomaron parte con éxito 58 Estados y 10 organizaciones internacionales, del 20 al 21 de noviembre de 2013, con objeto de evaluar el grado de preparación a escala nacional e internacional frente a la explosión simulada de una bomba sucia.

El ejercicio, de nombre en clave “Bab Al Maghrib”, tuvo lugar en Marruecos y lo organizó el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). Fue la primera ocasión en la que se llevó a cabo un ejercicio de esas características a gran escala y a nivel internacional.

“Bab Al Maghrib” forma parte del programa de ejercicios ConvEx-3 del OIEA, que se realizan cada tres o cinco años, hasta ahora sobre la base de un accidente en una planta de energía nuclear. Este año se partió de una situación distinta, a saber, la explosión de una bomba sucia con amenaza de nuevos ataques y efectos radiológicos generalizados.

La situación de emergencia consistió en dos explosiones simuladas sucesivas de dispositivos de dispersión radiológica, a modo de bombas sucias. Se produjeron en el puerto de Tanger-Med y en la medina de Marrakech, en Marruecos, y sirvieron para que los gobiernos y las organizaciones internacionales participantes extrajeran una serie de consecuencias "reales", "potenciales" y "apreciables".

En el ejercicio se analizó el caso de una hipotética fuga radiactiva a la atmósfera, las respuestas a nivel médico y sanitario, la seguridad, la transparencia de las comunicaciones con el público y las actividades industriales, turísticas y comerciales relacionadas con la importación y exportación de bienes. Si bien las conclusiones del ejercicio “Bab Al Maghrib” están especialmente asociadas a la simulación de explosiones de bombas sucias, en particular la gestión de la respuesta a impactos localizados, muchas de ellas también son útiles para otros tipos de emergencias nucleares y radiológicas.

En una emergencia medioambiental la dilución atmosférica, la sedimentación y el lavado en la precipitación de contaminantes vienen dados por las condiciones meteorológicas. En el caso de los dispositivos de dispersión radiológica, es particularmente importante contar con información meteorológica precisa y localizada, así como con previsiones a corto plazo para facilitar la adopción de decisiones sobre respuestas inmediatas. De ahí que el Servicio Meteorológico Nacional de Marruecos y la OMM participaran en la planificación y la ejecución del ejercicio “Bab Al Maghrib”.

Los Centros Meteorológicos Regionales Especializados (CMRE) de la OMM en Toulouse y en Exeter colaboraron en las actividades de planificación y seleccionaron datos meteorológicos históricos relativos al 28 de febrero de 2013, con viento proveniente del sur, que se supone fue el causante de que la contaminación se desplazara a través del Mar Mediterráneo hasta Gibraltar y España. Se proporcionaron al Servicio Meteorológico de Marruecos los resultados de modelos de dispersión a pequeña escala por medio de un sitio web específico en el que se facilitaba información sobre la dirección y la difusión de la contaminación. El CMRC de Toulouse brindó apoyo al Servicio Meteorológico de Marruecos durante el ejercicio.

Los objetivos concretos de este ejercicio para el OIEA eran determinar la eficacia de su Sistema de Respuesta a Incidentes y Emergencias y de su plan de respuesta a emergencias; evaluar la eficacia de la comunicación con Marruecos, otros Estados Miembros, los medios de comunicación y el público, y probar los arreglos de coordinación de la prestación de asistencia a nivel internacional.

Entre las conclusiones extraídas de forma inmediata cabe destacar la necesidad de mejorar la colaboración de las autoridades de seguridad de los Estados y de ofrecer al público una comunicación transparente, objetiva y de fácil comprensión, al tiempo que se protege la información sensible, un equilibrio difícil de lograr. Durante las próximas semanas el OIEA recabará información de los Estados Miembros y las organizaciones internacionales participantes a fin de elaborar un informe exhaustivo que se usará para aumentar el grado de preparación a nivel nacional e internacional frente a emergencias de índole similar.

El Comité Nacional sobre Ejercicios de Marruecos diseñó el escenario del “Bab Al Maghrib”, cuya dimensión internacional fue coordinada por el Grupo de Trabajo para la Coordinación Internacional de Ejercicios en el marco del Comité Interorganismos sobre Emergencias Radiológicas y Nucleares.

Fuente: OMM

Esta entrada se publicó en Noticias en 12 Dic 2013 por Francisco Martín León