¿A las puertas del primer episodio de lluvias torrenciales del otoño climatológico?

Parece que el otoño climatológico, que comenzó el pasado sábado, quiere hacerse de notar en nuestro país. El mes de septiembre ha continuado con la inercia inestable que llevamos arrastrando en España desde el invierno pasado (lluvias intensas de enero), con una primavera de récord por los acumulados de precipitación en la vertiente atlántica y un verano especialmente tormentoso.

Parece que el otoño no se quiere quedar atrás. Durante los últimos días, tanto el modelo Europeo como el GFS americano platean una posible situación a la que tendremos que estar muy atentos. ¿Se imaginan qué puede ser? Nada más y nada menos que un episodio de lluvias torrenciales asociado al descuelgue de una gota fría sobre la vertical peninsular. Eso sí, por ahora es sólo una tendencia, pero los plazos son razonables.

Por ahora los mapas señalan una situación ideal para que las lluvias sean importantes en el litoral mediterráneo. ¿Qué es lo que hace falta? En primer lugar, aire frío e inestabilidad en altura por el avance de una vaguada o por el descuelgue de una gota fría o de una DANA. Después, viento de levante de largo recorrido marítimo y una superficie marina a una temperatura relativamente alta.

¿Dónde se producirían las lluvias más importantes?

Parece que a finales de semana se pueden dar estas condiciones, con el desplazamiento del anticiclón hacia Centroeuropa tendríamos asegurados los vientos procedentes del Mediterráneo, cargados de calor y humedad, ya que la temperatura del mar es superior a los 27ºC en estos momentos. ¿Y el ingrediente principal? Un embolsamiento de aire frío en altura que se puede descolgar sobre el Estrecho entre domingo y lunes.

En sus últimas salidas, tanto el modelo Europeo como el GFS prevén acumulados de más de 100 l/m2 en numerosas zonas de la Comunidad Valenciana, Región de Murcia, mitad oriental de Castilla - La Mancha y de Andalucía o en Teruel, con picos de hasta más de 200 l/m2, eso sí, hasta el día 14. Además, los modelos no descartan que se puedan encadenar distintos episodios de inestabilidad.

Las precipitaciones podrían ser casi generales en la Península Ibérica y Baleares, y curiosamente donde menos llovería sería en Galicia, que en este tipo de situaciones se suele quedar un poco al margen. Sin embargo, tendremos que estar atentos a las actualizaciones de los modelos para ver si estamos ante un episodio de chubascos y tormentas más bien generales, o si de nuevo serán aguaceros muy locales.

Las previsiones en esta época pueden cambiar de un momento a otro

Sin embargo, hay que tener muy en cuenta que en esta época resulta muy aventurado hacer una previsión a más de 3 o 4 días, aunque por ahora tanto las salidas deterministas como los ensembles de GFS o Europeo coinciden. Recordemos que esta situación es simplemente una tendencia, y que pequeños detalles cambian totalmente la previsión. Sin olvidar lo erráticas e impredecibles que suelen ser las gotas frías o DANAS.