El frío y la barba de los hombres, ¿tienen algo que ver?

Hoy en día conocemos la barba de los hombres más por su atractivo que por realmente su función, al igual que el resto de vello que hay en el cuerpo. ¿Tiene algo que ver el frío con su presencia en la cara?

Hombre con barba
El hombre aún conserva la barba desde la prehistoria

Hay muchas diferencias entre el cuerpo de una mujer y el de un hombre. Es evidente. Una de ellas es la presencia y el volumen de vello en algunas zonas. Incluso también en su forma. Si imaginamos los dos cuerpos desnudos uno al lado del otro, de entre todas las diferencias, la que más llama la atención es la presencia del pelo por muchas zonas del cuerpo del hombre, más que en la mujer.

La cara es la parte del cuerpo que más empieza a diferenciarse cuando pasamos de niños a hombres. A diferencia de ellas, a nosotros nos crece pelo en una amplia región de la cara. Cuanto más crecemos, más duro se pone este pelo hasta que de mayores, si no lo cortamos, crecería y crecería hasta apenas dejarnos ver algo de piel en la cara.

A día de hoy lucir o no lucir barba y bigote se ha convertido en algo más bien cultural y estético. Hay quien decide ir rasurado, pero otros dedican tiempo y dinero en llevar una barba perfecta. Lo mismo sucede con el bigote. Como podríamos imaginar, ese pelo no está ahí por motivo del azar y ha tenido en la antigüedad una función, lejos del que le damos hoy en día. El frío tiene algo que ver.

La barba, algo más que atracción

Hay varias teorías que intentan dar una explicación a la presencia de la barba en los hombres. Antes de nada, hay que comentar que esta barba aparece por culpa de una hormona que segrega el cuerpo masculino y no el femenino.

El motivo por los que el hombre aún conserva la barba lo tenemos que buscar en la prehistoria. El hombre era quien salía de la cueva para cazar y tenía que estar preparado. El vello en la cara lo protegía del frío, uno de los motivos principales, pero no el único. También lo protegía de los rayos solares para no quemarse en verano.

Hombre cuida la barba
Algunos hombres dedican muchos cuidados a su barba

Pero hay más explicaciones acerca del motivo por el cual el hombre cuenta con pelo en la cara en forma de barba. Cuando esta es muy frondosa, protege de posibles golpes toda esta parte de la cara, muy sensible a recibir impactos en caso de peleas, ataques de animales o caídas. Los impactos quedarían amortiguados y los daños serían menores. Incluso los dientes quedarían bajo su protección.

Hay quien compara la barba de los hombres con la melena de los leones. No solo como protección, sino también como símbolo de fortaleza y virilidad, importante a la hora de iniciar una pelea o de incluso competir con otro semejante para aparearse. De ahí que algunas culturas se dejaran la barba, no solo por su función, sino por lo que significaba.

La semana de los santos barbudos

En la actualidad aún heredamos esta barba, aunque dentro de muchos años posiblemente la perdamos ya que no tendrá ningún sentido su presencia. La evolución hará lo que tenga que hacer.

Por ahora, y ya que estamos en la época más fría del año, toca mirar el calendario y comprobar que llega en breve la semana de los santos barbudos. Suele coincidir con los días más gélidos del invierno y hasta cinco santos tienen barba en pocos días. San Pablo Ermitaño el día 15, San Mauro Abad también el 15, San Antonio Abad el 17, San Fructuoso de Braga el 21 y San Vicente Mártir el 22. Quizá es una casualidad que todos tengan barba en esta época tan fría. O no.