La temperatura del mar Mediterráneo acaba de tocar fondo, ¿por qué ahora?

El año pasado el Mediterráneo fue noticia debido a las altísimas temperaturas que registraron sus aguas, prácticamente similares a las de un mar tropical y con mediciones de más de 30 ºC en puntos de Baleares y del golfo de València, batiéndose algunos récords. ¿Volveremos a ver algo parecido este verano? De momento eso nos queda muy lejos, pero lo que sí podemos confirmar es que acaba de producirse su pico mínimo anual.

¿Por qué la temperatura del mar alcanza sus valores mínimos a principios de primavera y no en invierno?

En primer lugar, conviene recordar que la temperatura del mar alcanza sus valores más bajos entre finales de febrero y principios de marzo, y no en diciembre o en enero, meses con menos horas de luz y temperaturas frías. La clave es la gran capacidad calorífica que tiene el agua: por este motivo retiene de forma tan eficiente su temperatura.

Para que sea más entendible, al mar le cuesta mucho que suba de temperatura, y a la vez, tarda mucho tiempo en enfriarse. Por ejemplo, alcanza su temperatura más alta en agosto o principios de septiembre, reteniendo todo el calor que ha acumulado en verano. A partir de ahí, la temperatura se reduce progresivamente al ser los días más cortos y fríos, pero debido a esta inercia los picos más bajos se producen precisamente en estas fechas, al final del invierno.

Picos mínimos cada vez más suaves

De acuerdo con los datos del CEAM, la temperatura del Mediterráneo acaba de tocar fondo, y a partir de ahora irá subiendo progresivamente. Dependiendo de las condiciones meteorológicas de los próximos meses, lo hará de una forma más brusca o atenuada. Recordemos que el calor de récord de mayo de 2022 y la ausencia de temporales disparó la temperatura del Mediterráneo hasta los 25 ºC en junio en aguas españolas, una cifra extraordinaria para dicho mes.

En el conjunto del "Mare Nostrum", la temperatura superficial mínima registrada en este 2023 es una de las más suaves desde que hay mediciones, situándose algo por debajo de los 16 ºC, algo que por otra parte se veía venir teniendo en cuenta que venía de la situación anómala de este verano. Por otra parte, se aprecia que los mínimos más suaves se han concentrado en estos últimos años, en línea con el preocupante y acelerado incremento que se está observando en el último medio siglo en aguas mediterráneas.

El Mediterráneo, más frío junto a la costa. ¿Por qué?

En las playas mediterráneas españolas veremos estos días de calor anómalo a mucha gente tomando el sol, pero a pocos atreviéndose a darse un chapuzón: de hecho cuesta más bañarse en Semana Santa que en Navidad por lo que comentábamos de la inercia térmica del mar.

De acuerdo con los últimos datos de nuestro modelo de referencia, en estos momentos la temperatura del mar ronda los 14,5 ºC en el entorno del Estrecho y mar de Alborán, mientras que en las aguas de Baleares se encuentra entre los 12-14 ºC, apreciándose un descenso más importante en Mallorca y Menorca, tras el paso de la borrasca Juliette.

Curiosamente, las temperaturas más bajas las encontramos junto a las costas de la Comunitat Valenciana, Región de Murcia y Cataluña, situándose entre los 11-13 ºC. ¿Por qué está tan fresca ahí? Las últimas irrupciones de aire polar y los vientos de tierra a mar explican esta situación: los vientos terrales empujan las masas de agua que están junto a la costa mar adentro, que son reemplazadas por aguas más frías procedentes del fondo. Esto es lo que explica que la temperatura superficial del mar esté hasta 1 ºC por debajo de la media climática de estas fechas.

¿Cómo está la situación en el resto de España?

Si nos vamos al Cantábrico, en general la temperatura del agua oscila entre los 11,5-13 ºC en los últimos días, prácticamente clavando su promedio de principios de marzo. Tampoco se aprecian anomalías significativas en las rías y playas gallegas, donde se mantiene en torno a 13-13,5 ºC. En el golfo de Cádiz hay diferencias: en aquellas zonas más próximas a la costa la temperatura del Atlántico ronda los 14-15 ºC (ligeramente por debajo de la media), mientras que mar adentro se acerca a los 17.

La cosa cambia si nos vamos a Canarias, uno de los destinos turísticos por excelencia en invierno gracias a su clima subtropical y a sus aguas templadas durante todo el año. En estos momentos la temperatura del océano se encuentra sobre los 18,5 ºC en las islas oriéntales, mientras que en las occidentales se acerca a los 21 ºC, unos 2 ºC por encima de lo habitual en estas fechas.